Aprobado por la Federación Internacional de Gimnasia en abril de 2024, y en vigor desde enero de este año, el nuevo Código de Puntuación, que introduce cambios importantes en busca de equilibrar la técnica con la expresión artística, ya se ha estrenado en competiciones continentales, pero en Río vivirá su primer examen a escala mundial.
En el escenario del Mundial de Río, la gimnasia rítmica desplegará su máximo espectáculo.
Brasil, como anfitriona, llega con la motivación extra de haber conseguido su primer oro en un concurso general de la Copa del Mundo de Milán (Italia) el pasado mes de julio, un logro que pone al conjunto de Duda Arakaki - junto a María Paula Caminha, Sofía Pereira, Nicole Pírcio y Ana Luiza Franceschi - en el centro de todas las miradas.
En individuales, Bárbara Domingos se consolida como referente continental: olímpica en París 2024 y única gimnasta de América que ha alcanzado una final mundialista completa, sigue marcando la pauta para el país sudamericano.
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Entre las selecciones que aspiran al podio, el conjunto mexicano ha demostrado un crecimiento constante. Con Dalia Alcocer, Sofía Flores, Julia Gutiérrez, Fernanda Salas, Kimberly Salazar y Adirem Tejeda, destacaron en los Panamericanos de Asunción al colgarse la plata en cinta y el bronce en ejercicio mixto.
Por su parte, Marina Malpica, pionera al convertirse en la primera mexicana en disputar una final mundialista, lidera la participación individual de su país, con Valentina Moya acompañándola para reforzar la presencia azteca en el tapiz.
España también apunta a ser protagonista. Con Inés Bergua al frente como capitana, acompañada por Andrea Corral, Marina Cortelles, Andrea Fernández, Lucía Muñoz y Salma Solaun, el equipo español pisa el tapiz carioca con la vitola de favorito, tras encadenar dos tripletes de oro consecutivos en el Europeo estonio y en la Copa del Mundo de Cluj-Napoca (Rumanía). Una hegemonía que proyecta respeto, incluso entre sus rivales más poderosas.
China completa la lista de favoritas con un bloque que combina experiencia y talento. Campeona olímpica en París 2024, rompió la hegemonía europea y llega a Río con la misma ambición que la llevó al oro.
El equipo, integrado por Ding Xinyi, Guo Qiqi, Hao Ting, Huang Zhangjiayang, Pu Yanzhu y Wang Lanjing, combina cohesión y técnica, virtudes que las han consolidado como referentes mundiales y les permiten destacar tanto en los ejercicios conjuntos como en las rutinas individuales.
Entre regresos esperanzadores y equipos consolidados, el Campeonato del Mundo de Río de Janeiro servirá como prueba de fuego para las gimnastas y un termómetro para las potencias de la rítmica. Cada rutina sobre el tapiz carioca medirá la técnica, la expresión y la determinación de quienes buscan dejar su huella en esta cita que marca además el inicio de un nuevo ciclo olímpico.