–¿Usted ve que este Gobierno se está preparando para renegociar Itaipú?
–Lo que yo veo es que Brasil ha comenzado a tomar prisioneros, con el objetivo de tener de rehén a la política exterior paraguaya, y está logrando su objetivo. Es decir, para Itamaraty hoy ya está sucediendo lo que debería ocurrir en el 2023. Entonces, ese Código Rojo de la Interpol contra (Horacio) Cartes realmente es un Código Rojo para Itaipú.
Darío Messer fue arrestado en São Paulo el 31 de julio pasado. El foco de interés de las investigaciones brasileñas era Darío Messer, pero de julio a noviembre se vino desarrollando un operativo denominado “Operativo Patrón”, donde no se profundiza el caso Messer, porque el objetivo es Horacio Cartes.
–Aparentemente tienen pruebas muy serias contra Cartes...
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–Son indicios muy débiles. Lo que voy a decir a lo mejor no es muy popular en estos momentos, pero a mi criterio hay indicios muy débiles o tal vez ni uno, porque una carta o intentar una comunicación por Whatsapp, que finalmente es frustrada, no es prueba.
–¿Entonces, cuál sería el propósito de fondo?
–Inclusive no es Cartes. Para Brasil es vital controlar el Partido Colorado y en este momento ya le tiene de rehén a Mario Abdo con el juicio político que siempre va a estar latente; y ahora le tienen a Horacio Cartes y, de cierta manera, al exministro del Interior Juan Ernesto Villamayor, inclusive al senador (cartista) Sergio Godoy.
–¿No le parece que la maniobra, más bien, es “matar” a Cartes”, pero “salvar” a Marito de un eventual juicio político para que sea totalmente funcional a sus intereses?
–Claro, pero les tiene de rehén a los dos. Esa es la práctica de Brasil desde siempre. Hay que recordar que el fundador de la ANR, Gral. Bernardino Caballero, luego de ser tomado prisionero, tras la muerte del Mcal. López en 1970, fue llevado a Río de Janeiro, donde después salió libre y “farreaba” con el varón de Río Branco (fundador de Itamaraty). Mario Abdo confesó que le encanta que (Jair) Bolsonaro le diga “Marito”, así como a Caballero le encantaba que José María Paranhos le llevara recorrer los lupanares cariocas.
Lo que quiero decir es que el Partido Colorado, desde sus orígenes, estuvo muy cerca del Brasil y para éste es muy importante hoy controlar a las dos facciones más importantes de este partido. Entonces, Brasil tiene hoy una “Espada de Damocles” sobre nuestra política exterior y le tiene prisionero al Senado paraguayo por donde pasarían las notas reversales relativas a una eventual revisión del Anexo C o del Tratado de Itaipú.
–¿Cómo se explica el argumento de que para Brasil Messer tiene una importancia secundaria hoy?
–Darío Messer es una persona de interés para el Brasil desde hace 30 años. El famoso “súper policía” Romeu Tuma ya lo tenía identificado (como alguien que se dedicaba a negocios turbios) a través de la “Operación Macuco” en la que se descubrió que en los 90’s se lavaron alrededor de US$ 30.000 millones. Entonces, por qué ahora le capturan y de julio a noviembre no hay nada sobre Messer, y sale un fiscal brasileño a decir que no le importan los fueros de Horacio Cartes.
–Pero, así como se está presentando el caso, Messer habría involucrado a mucha gente en Paraguay…
–Yo no digo que el “Lava jato” no tenga ramificaciones en el Paraguay y que no se tenga que seguir investigando hasta llegar a todos los presuntos involucrados. Pero, este Código Rojo tiene un objetivo de fondo cual es tener de rehén a la política paraguaya. La persona de interés de las autoridades brasileñas es supuestamente Darío Messer y el “Lava jato” que se hizo en el Brasil. Pero en un giro espectacular, están detrás de una persona con mucho poder económico y político en Paraguay, porque si controlan esta facción del Partido Colorado, controlarán la revisión o renegociación del Tratado de Itaipú.
–¿Se podría atribuir a este escenario la “extraña” inacción del Marito en preparar al país para una renegociación exitosa en Itaipú?
–Totalmente. La inacción proviene de que ya le tienen de rehén y para reasegurarse de que esa inacción va a continuar, ahora buscan neutralizar a otro importante exponente del coloradismo. Los otros aspectos importantes del 2023 que ya están sucediendo es la privatización de Eletrobras y la pelea por el embalse de Itaipú, que ya bajó 1,76 metros. Por eso digo que el 2023 ya está sucediendo en este mismo momento, con algunos condimentos como la construcción de dos puentes y otros sobornos encubiertos para que el Gobierno paraguayo no haga nada y lleguemos totalmente indefensos.
–Entonces, ahora ¿quién podrá ayudarnos?
–En el libro “50 años del Tratado de Itaipú” proponemos la contratación de algunas asesorías internacionales, porque Jeffrey Sachs es economista y él ya dio sus conclusiones y pareceres sobre los aspectos económicos de Itaipú, pero lo que nosotros necesitamos ahora es la ayuda de un instituto de derecho internacional que forme parte de nuestro frente jurídico.
Es cierto, hay muchos abogados en Paraguay entendidos en derecho internacional, pero hay que enfocarnos bien en lo que va a ser nuestra hoja de ruta y tener ya lista una eventual demanda ante la Corte Internacional de Justicia en la Haya. Para eso, por ejemplo, se podría contratar servicios de “The Institute for International Law and Justice (IILJ)”, “The Grotius Centre for International Legal Studies of Leiden/The Hague”, “The Max Planck Institute Luxembourg for International”, “European and Regulatory Procedural Law”; también a Stephen McCaffrey y Martti Koskenniemi.
–Pero, ¿quién es el que se va a encargar de materializar todo eso?
–Constitucionalmente el que maneja las relaciones internacionales es el Poder Ejecutivo. Ahora, en esta situación en la que no está pasando nada, tenemos que ser más creativos y podemos hablar de una “diplomacia parlamentaria”, que es otra avenida existente. Eso supone que el Congreso tiene que buscar aliados en el ámbito internacional.
Una idea que podría ser útil es contactar con la “Comisión de Helsinki”, que es una comisión bicameral del Congreso de Estados Unidos de Norteamérica, creado originalmente para encarar problemas europeos, pero que después se extendió a problemas similares en otros continentes. Básicamente se ocupa de tres desafíos: Problemas de geopolítica regional, de desarrollo económico y de derechos humanos; y la idea es tratar de sensibilizar al Gobierno de los Estados Unidos sobre la causa paraguaya en Itaipú Binacional. Esta comisión está integrada por nueve senadores, nueve miembros de la Cámara de Representantes y tres representantes del Ejecutivo.
–¿Los partidos políticos locales no deberían estar “cerrando filas” con el Ejecutivo para enfrentar esta grave situación?
–Mario Abdo había anunciado en campaña que iba a convocar a todos los partidos para defender la causa de Itaipú como una “causa nacional”, aunque no sé con qué formato o estructura. Finalmente terminó eso en esta “Comisión de Notables”, de cuyas deliberaciones nada sabemos. No obstante, para seguir la norma constitucional, la iniciativa tendría que venir del Poder Ejecutivo. Ahora, a falta de esa iniciativa, lo único que los partidos políticos pueden hacer es presentar propuestas al público.
–Pero, ¿no deberían acercarse y proponerlas directamente al Presidente?
–El Presidente visitó todos los partidos en la primera semana de su gobierno como un gesto político de que quiere trabajar con todos los sectores, y yo creo que él sabe bien que si tiene la predisposición de trabajar en esta causa, los demás partidos estarán predispuestos a contribuir en lo que se pueda en la defensa de nuestros intereses en Itaipú. Por eso, al menos a nivel del PLRA, se trabajó en una propuesta que ya se hizo pública.
Ficha técnica de nuestro entrevistado
Theodore Stimson es abogado graduado de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), promoción 1992. Es además Máster en Leyes por la Universidad de Chicago, Estados Unidos (1994), y especializado en Derecho Administrativo, Energético e Internacional. Es además árbitro del Centro de Arbitraje y Mediación del Paraguay (CAMP), de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios del Paraguay (CNCSP), y miembro de la Cámara de Comercio Paraguayo-Americana. Es igualmente el redactor principal del libro “50 años del Tratado de Itaipú”, propuesta de la Mesa Energética del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), presentado hace unos 22 días.
jfleitas@abc.com.py