El ministro de Interior argentino, Rogelio Frigerio, señaló que lo más valioso es el tiempo y esperan evitar el incordio de tener que perder largas horas haciendo “cola” sobre la pasarela.
Expresó que existe la cantidad necesaria de personal para cumplir con la demanda, hecho que se da particularmente durante la temporada de vacaciones, en la que al menos unas 30.000 personas cruzan a través del viaducto en días pico.
La cantidad de funcionarios de Migraciones afectados a los controles en este punto fronterizo es de unos 120, distribuidos en tres turnos, detalló.
