A la hora prevista, estuvieron presentes los acusados, abogados y todos los testigos, pero no así los fiscales Federico Delfino y Zunilda Ocampos. El primero alegó recargo de trabajo y la segunda, problemas de salud.
Indignado por la nueva suspensión del juicio, Jorge Bogarín, uno de los defensores, repudió el actuar de los agentes fiscales. Resaltó que las veces que los defensores piden suspensión se les trata de chicaneros y a los fiscales no se les dice nada.
Los acusados son los hermanos Josemar y Jozemar Borba Pruzzak, David Freitas, Darcy Longarett y Yesica Patricia Hoffmann López.