SAN BERNARDINO, Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional). Con una importante extensión de humedales prácticamente secos, el bajo nivel de agua y una altísima contaminación se encuentra hoy el lago Ypacaraí. A lo largo de estos años se plantearon un sin fin de supuestas soluciones para su recuperación, pero hasta el momento no pasaron de ser documentos (ver infografía).
En setiembre del año 2016, el entonces ministro del Ambiente, Rolando Barros, informó durante un congreso realizado en esta ciudad que la Itaipú Binacional destinaría más de US$ 8 millones en estudios de batimetría, comportamiento hidrológico y perfil del suelo de la zona del lago Ypacaraí y sus humedales. Este monto fue pagado a consultores y expertos ambientales. Así también, se instalaron estaciones de monitoreo y laboratorios, que en la actualidad nadie sabe dónde fueron a parar.
Dinero y más dinero
Según las estimaciones dadas por expertos en ese tiempo, dotar de alcantarillados sanitarios con plantas de tratamientos representaba una inversión aproximada de US$ 4 millones para cada localidad del perilago. Es decir, con lo gastado en supuestas investigaciones pagadas a consultores y “expertos ambientales”, dos localidades como la de San Bernardino e Ypacaraí ya hubiesen contado con un sistema de saneamiento integral.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Barros también mencionó en dicho encuentro que se contaba con un presupuesto de más de US$ 1.000 millones para la construcción de alcantarillados sanitarios y plantas de tratamiento en toda la Cuenca. De los cuales el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) tenía US$ 400 millones que ya se habían destinado a proyectos y obras en ejecución en las localidades de Areguá, Itauguá, Luque y San Lorenzo. Las obras de Itauguá, cuya inversión era US$ 4,5 millones y de Areguá, por un valor de US$ 5 millones se iniciaron con una donación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) a través de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). Sin embargo, jamás culminaron y se rescindió contrato con las empresas adjudicadas, por incumplimientos.
A esto se añaden los trabajos presupuestados para Ypacaraí que nunca arrancaron. El monto proyectado en ese entonces para estas obras fue de US$ 4,1 millones.
Otro eje planteado en esa oportunidad refiere al “Programa de saneamiento y agua potable para el Chaco y ciudades intermedias de la Región Oriental del Paraguay”, con fondos de la cooperación del BID y la AECID.
Este masterplan significaba US$ 250 millones para el área de saneamiento en ciudades, como Itauguá, Ypacaraí, Capiatá, Luque y San Lorenzo, incluyendo una planta de tratamiento del Arroyo Yukyry, que representaba una inversión de US$ 60 millones.
Otro “nuevo proyecto”
En conversación telefónica con el ingeniero Hugo Ruiz, director de Agua Potable y Saneamiento (Dapsan) del MOPC, dijo que ya no disponen con esos recursos porque supuestamente fueron destinados a otros proyectos, aunque no pudo especificar cuáles.
Añadió que actualmente están trabajando en un nuevo proyecto de saneamiento integral de la cuenca y, a la vez, gestionando los recursos para ello.
Cabe señalar que recién tras las últimas publicaciones, la Comisión de Gestión y Manejo del Lago Ypacaraí y su Cuenca (Conalaypa) como el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) apuraron la evaluación ambiental del lago para iniciar algunas posibles obras para salvarlo.