María Beatriz Paret de Palacio es la primera dama de la nación del Ecuador. Agradable, muy elegante y de carácter afectuoso pero fuerte, habló acerca de la realidad de su país, de las metas a corto y mediano plazo, su familia y sus intereses fundamentales, durante una visita que realizó ayer a este matutino.

"Se empieza a sentir una estabilidad, un poco más de tranquilidad, como para hacer planes, llevar a cabo los proyectos fundamentales del país", apuntó.

Para ello, buscan que se apruebe una ley que "nos levante un poco el techo, porque nos permitían que del dinero del petróleo solamente se podía utilizar un pequeño porcentaje; el resto quedaba como en un fondo para el desarrollo y, en cierta forma, mal utilizado, según lo que nosotros veíamos. Hemos logrado que se amplíe eso, con la finalidad de poder subir bastante el presupuesto de salud, educación y todo lo que es el área social. Nos han subido del 3,5% al 5%, aunque queremos más que eso", sostuvo.

Añadió que "se dejará un fondo para lo que es deuda externa, reinvertir en el área petrolera, pero se va a tratar de sacar un buen pedazo de ese montón de millones de dólares para ayudar al área social, que, definitivamente, es la más necesitada del país. Somos un gobierno con fines básicamente sociales".

Destacó que la misión encarada por su marido, el presidente Dr. Alfredo Palacio González, y por ella, como primera dama, es una responsabilidad frente al país y "más que frente al país, frente a Dios; el es el Ser supremo. Somos personas muy religiosas. Pienso que, si nos puso en este trance, en este momento, tiene que tener un objetivo, que es el objetivo social".

Subrayó que "hay mucha necesidad en mi país, hay muchos pobres, hay mucha desigualdad económica; esa es la meta. La meta es por lo menos proveerles de mejor salud y mejor educación, que, si no alcanzamos en un periodo bastante corto, trataremos de dejar bases, cambios fundamentales para que la situación quede un poco mejor, para el que tome el mando".

Así, las metas principales y más importantes son -explicó- educación y salud.

De esta forma, están impulsando el proyecto del aseguramiento universal de la salud (AUS); el plan es -refirió- que, de aquí a unos cinco años, todos los ecuatorianos cuenten con un seguro de salud. "Es un programa que lo ha venido trabajando mi marido desde hace 9 años. Fue la razón por la cual aceptó ser vicepresidente del Ecuador. Pensó realmente tener el apoyo absoluto del que era el presidente", manifestó, para luego agregar que "parece que se olvidaron de la parte social; no se hizo, pues, un buen gobierno; le costó la salida -al presidente anterior-; entonces ahora son un año y medio que tenemos, pero, si logramos cambiar la ley y sacar el AUS, va a ser un buen gobierno".