Viejos vínculos fortalecidos

Mañana se registrará un hecho inusual y sin precedentes en nuestro país: Llegará en visita oficial el ministro de Relaciones Exteriores de la Federación de Rusia. Esta presencia es para estrechar vínculos con aquel lejano país tan anatematizado en los largos años de la Guerra Fría. La visita del ministro Sergei Lavrov es buena ocasión para refrescar la memoria de los aportes de rusos a la sociedad paraguaya.

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El 14 de mayo de 1992, el embajador paraguayo en el Uruguay y su colega ruso Igor Lapter suscribieron el tratado que establecía relaciones diplomáticas entre nuestros dos países. Hace unos meses se cumplieron 15 años de aquel acontecimiento. Pero las vinculaciones de nuestro país con Rusia datan del siglo XIX, pues, justamente en los archivos rusos figura correspondencia oficial desde la época de los López (cartas de Francisco Solano López al emperador Alexander II en 1862; del presidente Bernardino Caballero a Alexander III en 1882 y de Nicolás II a Juan Bautista Gaona, en 1905). Inclusive un conocido historiador italiano hacía referencia de numerosos documentos que mencionaban al dictador Francia que encontró en archivos de Moscú.
Los vínculos de los rusos con el Paraguay se estrecharon en momentos cruciales de nuestra historia
Rusos en el Chaco
Los rusos que llegaron al Paraguay huyendo de los bolcheviques llegaron al Paraguay en el primer tercio de la década del ’20 y rápidamente se involucraron con los destinos y la suerte de su patria de adopción, en las más diversas disciplinas: ciencia, arte, docencia y, cuando sobrevino la Guerra del Chaco, no dudaron en alistarse para cooperar en la defensa del territorio.
Uno de los principales jefes rusos que desde el primer día de su presencia en el país tuvo activa participación fue el general Iván Belaieff, quien con sus compatriotas Von Eckstein y Serebriakoff, y oficiales paraguayos, fueron los descubridores de la laguna Pitiantuta, cuya posesión encendió el polvorín chaqueño. Otros altos oficiales fueron los generales de división Nicolás Ern y Stephan Vysokolan, y el general de brigada Jorge Butlerov.


También se destacaron los coroneles Boris Frey, Sergio Kern, Leo Orangiereff, José Puschkarevich, Dr. Arturo Weiss (de sanidad), Alejandro von Eckstein, José Kielo Gablesky (comunicaciones), los tenientes coroneles Sergio Stchekin, Sergio Salaskin, Igor Orangiereff, Arsenio Kolankovsky, Boris Kasianoff, los mayores Nicolás Chircoff, Nicolás Hodoley, Nicolás Korsakoff, Leonidas Lesch, Basilio Ore fieff Serebriakoff (aquel que el 28 de septiembre de 1932 había expresado “Qué lindo día para morir”), el Dr. Mitrofan Retivoff (de sanidad), Eugenio A. Bauer von Ekartshansen, Dr. Nicolás Butkevich (veterinario), Nicolás Goldschmidt, Dr. Constantino Gramatchicoff (sanidad) y Vladimir Sryvalin; el capitán de fragata Jazon Tumanoff y los capitanes Nicolás Blinoff, Víctor Cornilovich, Boris Dedoff, Nicolás Emilianov, Boris Yurakosky, Jorge Ozols, Basilio Malutín, Vladimir Porfinenko (de aviación), Juan Tarakus, Jorge Tchirkin, Constantino Ungern Stemberg, Ernesto Altman, Bauer von Ekartshansen, Paul Chapochnikoff, Vladimiro Baschmakoff, Sergio Horodovich y Sergio Schetinin.
Recordados son también los nombres de los tenientes 1º Vsevolod Kanonnikoff, Eugenio de Giers (ambos de marina), Boris Ern, Alejandro Taranchenko, Constantino Malinovsky, Wadin Zakharoff (comunicaciones), Nicolás Golushkevich y los tenientes 2º Iván Bardick, Jorge von Horoch, Ladislao Woroniecky, Wladimiro Schetina, Rostilav Wilkins y el radiotelegrafista Wenceslao Yeloff.
En la retaguardia actuaron los generales de brigada Dr. Eugenio Timchenko (de sanidad) y Nicolás Zimovsky, mayor Dr. Juan Dirzne (de sanidad) y los capitanes Dr. Alejandro Gaidukoff, Sergio Belowsky (ambos de sanidad) y Emilio Zajarchouk. Los tenientes 1º de sanidad Gregorio Popoff y Dra. Vera Retivoff de Popoff, Vladimir Sadoff y Dra. Bárbara de Sadoff, el teniente 2º de sanidad Dr. Alejandro Latkowsky, empleado militar armero Sergio Welichev.

PROTAGONISTAS DE LA VINCULACION RUSA

Iván Belaieff: Militar, explorador, antropólogo y lingüista nacido en 1874 en Rusia, donde llegó a general de división del ejército imperial. En 1924 llegó al Paraguay exiliado luego de la revolución bolchevique y se incorporó al Estado Mayor del Ejército, teniendo una destacada actuación en los preparativos previos a la guerra paraguayo-boliviana. Realizó numerosas expediciones y arriesgadas exploratorias y de levantamiento cartográfico de los fortines chaqueños. Fue el descubridor de la laguna Pitiantuta en 1931. Por su intermedio llegaron al Paraguay varios oficiales del ex ejército zarista que también actuaron en la Guerra del Chaco y científicos que cooperaron en la fundación de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional. Sus exploraciones del territorio chaqueño le llevaron a conocer diversas etnias aborígenes, con las que estableció contacto, estudiando sus costumbres y perfiles culturales, como el caso de los ischir (chamacocos), nivaclé y, especialmente, macá, quienes les tenían gran estima y respeto.
Además de sus servicios militares, fue fundador de importantes entidades científicas y culturales, como el Patronato Nacional Indígena, la Asociación Indigenista del Paraguay, fue miembro de la Academia de Lengua y Cultura Guaraní, de la Sociedad Científica del Paraguay, administrador general de las colonias indígenas y administrador de la colonia-escuela indígena “Fray Bartolomé de las Casas”. Algunas de sus obras son Cahygua, Clanes entre chamacocos, Fortificaciones de campaña, Los indios del Chaco paraguayo y sus tierras, El maccá, Tabla de identificación de las tribus del Chaco, Vocabulario Maccá, clave I y apuntes gramaticales, etc. El general Belaieff murió en Asunción el 19 de enero de 1957.

Tala Ern de Retivoff: Bailarina y docente nacida en Tiflis, Rusia, el 8 de septiembre de 1912. Vino al Paraguay luego de la Revolución Rusa de 1917. Hija de un militar zarista y una pianista, creció en un ambiente propicio para las expresiones musicales. Antes de venir a América la familia se instaló en varios países europeos y durante ese periplo estudió danza con renombrados maestros. Por medio del general Juan Belaieff, el general Ern fue contratado por el Gobierno paraguayo y de esa manera, en 1925, la familia de la artista vino al país.
Durante la Guerra del Chaco, la joven artista dio varios espectáculos para recaudar fondos a favor de las tropas en campaña y al finalizar la contienda abrió su academia de enseñanza de danza clásica -la primera del país-, que fue habilitada oficialmente en 1940. En 1994 fue a vivir al Perú.
Wladimiro Kompanietz: Artista plástico de origen ruso, nació en Odessa el 22 de junio de 1901. Se trasladó a Bulgaria a estudiar en la Academia de Bellas Artes de Sofía, y realizó cursos de perfeccionamiento en Luxemburgo y en París, Francia. Como muchas familias rusas, tuvo que emigrar a América por cuestiones políticas, estableciéndose en la colonia Nueva Esperanza, cerca de Concepción, Paraguay. Se dedicó a la docencia, enseñando francés y dibujo entre 1938 y 1966. Realizó numerosas obras escultóricas y pictóricas y participó de varias muestras en Concepción y Asunción, además de ser promotor de diversas actividades sociales y artísticas en la ciudad de Concepción. Escribió un ensayo filosófico de Psicologías de Diversiones y fue activo miembro de la Alianza Francesa de esa ciudad.
Isaac Kostianovsky: Periodista nacido en Gallipoli, Ucrania, el 2 de noviembre de 1911. Siendo muy niño su familia se instaló en la Argentina, de donde después pasó al Paraguay, instalándose en Villa Rica, donde realizó sus estudios, que culminó en el Colegio Nacional de Asunción, además de realizar estudios universitarios, pero que no los culminó. Desde muy joven se dedicó al periodismo, fundando periódicos y revistas estudiantiles y colaborando con varios periódicos de la capital. El ejercicio de la profesión le valió apresamientos, persecuciones y exilios. Fue uno de los fundadores del periódico Ultima Hora, con Pablo Rojas. Falleció en Asunción en 16 de diciembre de 1981.
Nicolás Krivoshein: Científico ruso llegado al país en 1929 por invitación del general Iván Belaieff. Había huido de la revolución bolchevique de 1917, viviendo un tiempo en Checoslovaquia para luego emigrar a Suramérica. En nuestro país fue uno de los fundadores de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Asunción. Posteriormente se radicó en la Argentina, donde fue uno de los propiciadores de la fundación y primer director del Departamento de Electrotecnia, antecesor del Departamento de Ingeniería Eléctrica y Computadoras de la Universidad Nacional del Sur, de Bahía Blanca. A mediados de 1960 se desvinculó de esta universidad y regresó a Europa, donde falleció. Algunas de sus obras son: Cálculo vectorial, Método natural de cálculo de curvas de remanso y Fórmulas prácticas para la integración numérica.
Nadine Tumanoff: Artista rusa de origen noble, llegó al Paraguay en 1926 contratada por el Gimnasio Paraguayo para la formación de cantantes. En su país fue alumna de importantes maestros. En Asunción fundó su propia academia de Arte Lírico, presentando con sus alumnos óperas y conciertos. Otros destacados rusos en el Paraguay fueron el ingeniero Sergio Bobrovsky, primer decano de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Asunción; el matemático Sergei Sispanov, el ingeniero Sergei Conradi, el empresario y periodista Manuel Blinder, por citar solo a algunos.


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