La retinopatía en el prematuro ocurre en bebés por un desarrollo anormal de los vasos sanguíneos de la retina. La retinopatía en el prematuro puede producir ceguera.
El doctor Luis Gonsález, oftalmólogo pediatra, refiere que “la retinopatía es una enfermedad originada por una alteración en la formación de los vasos de la retina. En los niños prematuros estos vasos están formados en forma incompleta, cuanto más inmaduro nace un niño, menor es la superficie de la retina vascularizada y, por lo tanto, más grave será la enfermedad que se desarrolle”.
“Los prematuros suelen tener dificultad para respirar, por lo que requieren apoyo terapéutico con oxígeno y, en algunos casos, asistencia respiratoria mecánica. Numerosos trabajos han demostrado que un cuidadoso manejo del oxígeno con monitoreo continuo de los niveles de su saturación, logra disminuir la incidencia de retinopatía del prematuro”, señala.
Agrega, además, el profesional que “la incidencia de retinopatía del prematuro es mayor en niños que nacen con una edad gestacional menor a 32 semanas y peso al nacer menor a 1.500 gramos”.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
“Es muy importante el control de la retina por el oftalmólogo a la cuarta semana de vida, pero no más allá de las 32 semanas de edad gestacional corregida. Se entiende por edad corregida la que tendría el niño si hubiera nacido a término, es decir, a las 40 semanas de edad gestacional.
“Así también, son fundamentales los controles cada semana, de acuerdo al estadio de la retinopatía, hasta alcanzar la madurez de la retina entre las 40 a 43 semanas de edad gestacional corregida”, indica.
Asimismo, afirma que “en la mayoría de los casos la resolución de la retinopatía del prematuro es espontánea; sin embargo, existe un grupo que requiere tratamiento con láser o crioterapia para evitar el avance a estadios más avanzados, que pueden llegar a producir desprendimiento de retina y, por consiguiente, llevar a la ceguera”.
El control prenatal y el cuidado de la salud de la embarazada evitan el nacimiento de prematuros y las probabilidades de ceguera.