"Hablé con el presidente Erdogan sobre terrorismo y la situación en Oriente Medio. Estamos de acuerdo en que hay que luchar contra el terrorismo y proteger a los civiles. Aplaudo que la ayuda de emergencia esté ya llegando a Gaza. También hemos hablado de la adhesión de Suecia a la OTAN", explicó Stoltenberg en un mensaje en X (antes Twitter).
La conversación se produce en la misma jornada en la que ha abierto el paso fronterizo de Rafah, que conecta el norte de la península del Sinaí egipcio con la franja de Gaza, para permitir la entrada del cargamento de ayuda humanitaria a este enclave palestino.
Únicamente dos de los 20 camiones que entraron hoy en la Franja de Gaza por el paso de Rafah llevaban cargamentos de agua, lo que abastecerá a tan solo 22.000 personas durante un día, según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
La conversación coincide también con la cumbre internacional en Egipto encabezada por el presidente de ese país, Abdelfatah al Sisi, y en la que participan líderes de todo el mundo para abordar el conflicto armado entre Israel y el grupo islamista Hamas, la situación humanitaria en la Franja de Gaza y la "cuestión palestina".
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Entre los asistentes se encuentran el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres; el presidente en funciones del Gobierno español, Pedro Sánchez; el presidente palestino, Mahmud Abás, y el rey jordano, Abdalá II.
Por otro lado, Turquía y Hungría son los únicos dos países de la OTAN que aún no han completado la ratificación de la entrada de Suecia en la Alianza Atlántica, y el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, señaló el pasado 25 de septiembre que su país "no tiene prisa".
