"Al menos once personas, incluidos dos agentes de policía, murieron y cientos resultaron heridas durante los acontecimientos del 28 de octubre y durante la violencia que se desencadenó", lamentó la organización Human Rights Watch (HRW) en un comunicado.
La capital del país asiático fue el escenario de una gran manifestación del opositor Partido Nacionalista de Bangladesh (BNP) el pasado sábado, que se tornó violenta tras la intervención de la Policía para dispersar a los asistentes y que se saldó con dos muertos y más de cien heridos.
Este episodio dio lugar a una ola de violencia en las calles en los días posteriores, con la oposición llamando este miércoles a sus seguidores a bloquear por completo el país por segundo día consecutivo, mientras demanda un acuerdo con la gobernante Liga Awami para formar un Gobierno interino que asegure que las elecciones generales del próximo enero sean libres y justas.
De no suceder, el BNP ha anunciado que no participará en los comicios. El partido opositor ya acusó a la Liga Awami de amaño electoral en las elecciones de 2018, cuando logró una abrumadora mayoría parlamentaria.
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La responsable del servicio de bomberos, Rozina Aketer, dijo a EFE que hoy se reportaron al menos seis incendios de vehículos, incluidos autobuses de pasajeros, lo que eleva a dieciocho el número similar de incidentes en los últimos dos días, pese a que nadie resultó herido.
Pese a que HRW responsabilizó a ambas partes de participar en los enfrentamientos, señaló principalmente al Gobierno de la primera ministra, Sheikh Hasina, de la continua represión policial contra la oposición "en un intento de subvertir la participación y la votación" en los próximos comicios.
El grupo pro derechos humanos denunció además el arresto de miles de miembros de la oposición, incluido el secretario general del BNP, Mirza Fakhrul Islam.
Una represión que viene de lejos, según el partido opositor, que cifra en más de 1.500 el número de sus líderes y seguidores que han sido asesinados durante el Gobierno de Hasina, en el poder desde 2009, y sitúa en 1.200 los desaparecidos.
La ONU trasladó ayer su "profunda preocupación" por la violencia reciente en Bangladesh, según afirmó en un comunicado el Alto Comisionado para los Derechos Humanos (ACNUR), y llamó al Gobierno a "observar la mayor moderación".
La Liga Awami y el BNP han gobernado Bangladesh desde 1991, excepto por un breve gobierno casi militar en 2007-2008.
