Los obispos de Perú señalan que la corrupción ha aumentado ligada a la economía ilegal

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Lima, 25 ene (EFE).- Los obispos de Perú, reunidos en su asamblea plenaria, afirmaron este jueves que la corrupción en el país es "una verdadera pandemia" que se ha incrementado por "el aumento de una economía ilegal" manejada por organizaciones criminales trasnacionales, e invocó a la población a tomar posición para buscar salidas a la crisis.

En un mensaje suscrito por la Conferencia Episcopal Peruana, los representantes de la Iglesia católica afirmaron que el Perú vive "una suma de crisis" que afectan la vida social, la economía, la política y sobre todo la ética.

"Están en crisis los valores que fundaron la nación, involucrando a muchos de quienes hoy ejercen el poder en medio de un creciente autoritarismo", afirmó.

Advirtió que la "corrupción generalizada juega un rol central en los últimos años" y que se ha incrementado ligada a las distintas modalidades de la economía ilegal, como el narcotráfico, la minería ilegal, la tala ilegal, la trata de personas y el tráfico de inmuebles, que son manejadas por organizaciones criminales trasnacionales, que actúan de la misma forma en los países vecinos.

Citó, por ejemplo, que la aprobación de los recientes cambios en la ley forestal y de fauna silvestre, "favorece la deforestación de la Amazonía", y la pone en grave riesgo, razón por la cual exigió a las autoridades que reconsideren la aprobación de esta norma.

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Asimismo, los obispos señalaron que las redes criminales han visto "lo estratégico de corromper la política" y, por ese motivo, los partidos han sido reemplazados por "organizaciones que no existen para representar, sino solo para ganar puestos para sí mismas" en el Estado.

Con respecto a las protestas antigubernamentales del año pasado, que ocasionaron la muerte de 70 personas, entre civiles y uniformados, remarcaron que "las muertes no han sido aún esclarecidas" y que "no se ha realizado una investigación efectiva y la necesaria reparación", lo que ha generado que crezca la "animadversión de las regiones más afectadas con el Gobierno" de la presidenta Dina Boluarte.

Añadió que están deslegitimados el Poder Ejecutivo y el Legislativo, éste último por la designación de autoridades con antecedentes dudosos y las múltiples ventajas aprobadas para los mismos legisladores.

Los obispos expresaron que los peruanos necesitan "una democracia viva, no solo en la política, sino en lo social, en lo regional y en las relaciones interculturales".

"La política debe volver a ser efectivamente representativa de los intereses ciudadanos y transparente para salir del gran hoyo en el que nos encontramos", resaltó.

En tal sentido, los obispos invocaron a la ciudadanía a "tomar posición y asumir un compromiso activo para participar en la identificación y construcción de las salidas que requerimos para superar la crisis".

De forma similar, pidieron al Estado, a las empresas y a las organizaciones sociales que lleguen a "acuerdos concretos y sostenibles, mediante un diálogo justo, bien intencionado, transparente, sin violencias de ningún tipo y que rindan cuentas a la ciudadanía".