Las peleas de la coalición de Scholz continúan durante las vacaciones del canciller

Este artículo tiene 1 año de antigüedad
/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2393

Salvador Martínez MasBerlín 29, jul (EFE).- El canciller Olaf Scholz está oficialmente de vacaciones desde este lunes y durante las próximas tres semanas pero, pese a las fechas estivales, los choques entre los miembros de su coalición, cuyos ministros se enfrentan por cuestiones políticas como la inmigración, no llegan a su fin.

Christian Lindner, el ministro de Hacienda y líder del partido liberal (FDP), ha sido noticia por decir que no le convendría un eventual canciller ecologista como Robert Habeck, él y los liberales no podrían gobernar.

"Tengo clara una cosa: aún más verde, es decir, con un canciller verde y un programa de Gobierno más verde, eso no nos convendría", dijo Lindner, al aludir a un escenario político en el que haya un nuevo Ejecutivo, algo que ocurrirá tras las elecciones de 2025, que se prevén para septiembre del año que viene.

Por cuestiones más actuales y candentes como la inmigración y la criminalidad se han enfrentado la titular de Asuntos Exteriores, la ecologista Annalena Baerbock, y la ministra de Interior, la socialdemócrata Nancy Faeser.

La ministra del Interior trabaja para hacer realidad el lema para la política de inmigración pronunciado por Scholz el pasado otoño según el cual "tenemos por fin que deportar a gran escala", pero Baerbock ofrece resistencia a esas intenciones.

Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy

Baerbock, de hecho, se opone a facilitar deportaciones a países como Marruecos o Túnez, dos países que Faeser quiere considerar oficialmente "seguros" para facilitar así que las autoridades alemanas pongan en manos de sus homólogas norteafricanas a inmigrantes a Europa.

"Es algo nuevo que durante el tiempo de las vacaciones, haya miembros de la coalición traten de enfrentarse los unos a los otros para tratar de destacar", explicó a EFE Nils Diederich, politólogo profesor de la Universidad Libre de Berlín.

El Gobierno de coalición sufre en las vacaciones

La exposición de tiranteces en la coalición son un flaco favor para un Gobierno liderado por el canciller más impopular que se recuerda en la política alemana y un Ejecutivo cuyos partidos (SPD, Los Verdes y FDP) representan apenas todos juntos en los sondeos de intención de voto un 30 %.

"Nunca un canciller tuvo tan poca confianza de los alemanes, y que ahora se vaya de vacaciones mientras que los demás se siguen peleando hace que se pierda más confianza en los líderes políticos", dijo a EFE Manfred Güllner, analista del centro para el estudio demoscópico Forsa, una organización con sede en Berlín.

Güllner afirmó que "el gran problema que tenemos en la política es que los políticos en Berlín se han separado de los problemas de la gente en Alemania".

"Esto no tiene que ver con las crisis que atraviesa el país, porque en tiempos de la pandemia aquí se tuvo la sensación de que la canciller Angela Merkel se ocupaba de la situación y la confianza en el Gobierno, de hecho, creció", abundó Güllner.

El complejo panorama abierto para Alemania, en especial en materia energética y económica, por la guerra de Rusia contra Ucrania es un "momento en el que es la hora del Gobierno", según Güllner, pero el Ejecutivo de Scholz no ha sabido tranquilizar ante las crecientes inquietudes de los ciudadanos.

Los partidos radicales, con los brazos abiertos

Según el experto de Forsa, tanto los partidos del Gobierno como el principal partido de la oposición, la Unión Cristianodemócrata (CDU), mandan a los votantes a los "brazos de los radicales, ya sea Alternativa para Alemania (AfD), que ha crecido en intención de voto, superando su récord de 2017, y ahora viene la Alianza Sarah Wagenknecht (BSW)", según Güllner.

Alude este experto a cómo a AfD los sondeos le atribuyen actualmente un 18 % de la intención de voto, por delante del SPD (15 %), Los Verdes (11 %) y FDP (5 %), mientras que BSW, una formación que acaba de ver la luz, las encuestas le conceden un 10 %.

Para las elecciones que celebran en septiembre los estados del este Sajonia, Turingia y Brandeburgo, AfD parte como favorita según las encuestas, que también ven a BSW superando a los partidos del Ejecutivo federal.

Según explicó a EFE Diederich, el politólogo profesor de la Universidad Libre de Berlín, que haya ministros enfrentados durante las vacaciones de Scholz es algo que va a restar credibilidad al Ejecutivo, porque "los votantes van a seguir con la impresión de que la coalición no va a ganar tracción".

"La debilidad del canciller es que él no puede frenar esas peleas internas de la coalición, la gente lo nota", y por eso la gente terminará con la conclusión de "que a estos partidos de la coalición no se les puede votar", según Diederich.