Once muertos, incluidos cuatro militares, en un motín en una prisión de Chad

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2394

Yamena, 19 abr (EFE).- Un violento motín registrado la noche del viernes en la prisión de Mongo, capital de la provincia de Guéra, en el centro-sur de Chad, dejó once muertos, entre ellos cuatro militares, según confirmaron este sábado a EFE fuentes militares.

Según las primeras informaciones, recogidas por medios locales, alrededor de las 22.00 horas varios presos lograron escapar y hacerse con armas, lo que provocó una rápida escalada del incidente que obligó a intervenir a las fuerzas de defensa y seguridad chadianas.

“Fue caótico. Los prisioneros estaban armados y la situación se descontroló muy rápido. Tuvimos que actuar con rapidez para evitar un desastre mayor. Hubo 11 muertos: 7 prisioneros y 4 militares”, relató a EFE un militar presente durante la operación, bajo condición de anonimato.

El enfrentamiento también dejó varios heridos, entre ellos el delegado general del Gobierno en Guéra, Abdoulaye Ibrahim, quien recibió un disparo y, debido a su estado grave, fue evacuado de urgencia a Yamena, la capital del país, para recibir atención médica especializada.

“Escuché disparos muy temprano. Esta mañana, al despertar, la ciudad estaba conmocionada. Nadie sabe realmente qué ocurrió, pero la gente está muy preocupada por su seguridad”, dijo a EFE Adam Mahamat, residente de Mongo.

Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy

En respuesta a la crisis, el ministro de Seguridad Pública, Mahamat Charfadine Margui, y el jefe del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas, Abakar Abdelkarim Daoud, se desplazaron a esta ciudad para supervisar la situación sobre el terreno.

Las circunstancias exactas de la fuga y el número total de presos que lograron escapar aún no han sido esclarecidos, pero mientras continúa la investigación, las autoridades del país han intensificado la búsqueda de los fugitivos.

Este motín pone de manifiesto los persistentes desafíos de seguridad en los centros penitenciarios de Chad y reabre el debate sobre las condiciones de detención.