Choi, que también ocupa el cargo de vice primer ministro para asuntos económicos, hizo estos comentarios a su marcha hacia Estados Unidos hoy para dialogar sobre diversos temas, entre ellos los nuevos aranceles del Gobierno del presidente Donald Trump, que incluyen gravámenes del 25 % para las importaciones surcoreanas.
"Volveré tras abrir la puerta a las conversaciones para solidificar la alianza entre Corea del Sur y Estados Unidos", aseguró Choi a los periodistas reunidos en el aeropuerto internacional de Incheon, según recogió la agencia de noticias Yonhap.
Está previsto que Cho mantenga en Washington una serie de reuniones de índole económica, entre las que figuran los aranceles, aunque no se ha proporcionado una agenda concreta del contenido.
Choi viaja acompañado del ministro de Industria, Ahn Duk-geun.
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Está previsto que las negociaciones comerciales arranquen este jueves encabezadas por la parte estadounidense por el secretario del Tesoro, Scott Bessent, y el representante de Comercio, Jamieson Greer.
Corea del Sur es uno de los países a los que EE.UU. ha dado prioridad en las negociaciones tras la entrada en vigor de los denominados 'aranceles recíprocos' de Washington a sus socios comerciales con los que mantiene déficit o que considera que imponen barreras no arancelarias "injustas" para el país norteamericano.
El gravamen impuesto a Seúl es del 25 %, aunque ha sido temporalmente rebajado al 10 % en la moratoria general decretada por el presidente Trump durante 90 días antes las negociaciones.
"Negociaremos estrechamente con la Administración de EE.UU. para minimizar el impacto (de los aranceles) en las empresas surcoreanas", dijo por su parte Ahn en un comunicado.
Está previsto que el ministro de Industria parta hacia Washington el miércoles para unirse allí a Choi.
Además de Choi y Ahn, viajarán a EE.UU. para las conversaciones funcionarios de las carteras de Exteriores, Ciencia, Agricultura y otros ministerios, de acuerdo al Gobierno de Seúl.
Las autoridades surcoreanas han dicho que quieren centrarse en alcanzar un acuerdo mutuamente beneficioso y, según fuentes gubernamentales, Corea del Sur tratará de lograr la mayor reducción posible de los aranceles y abordar campos de cooperación conjunta, como la construcción naval y posibles acuerdos energéticos.