Hugo Fernández, representante del sector turismo, lamentó que “sobre los 90´”, los legisladores al parecer toman consciencia de la importancia del subsidio estatal para que la compañías como operativas y no se vean obligadas a despedir personal.
“Tenemos que saber cómo vamos a encarar el 1 de enero y necesitamos que se resuelva el pago de suspensiones laborales para mirar hacia adelante y esperar que se vaya recuperando, aunque las señales no son muy positivas, tenemos que pensar que vamos a ir recuperándonos”, expresó.
Por su parte, la presidenta del gremio de empresas de eventos, Sonia Cáceres, apuntó a que debido a las restricciones de cantidad de personas permitidas en actividades formales, el sector no logra reactivarse. “Todavía no podemos decir que hay reactivación económica porque no pudimos avanzar a 150 personas en eventos al aire libre y con todo lo demás que está pasando, y además, eventos formales reciben las mayores restricciones”, expresó.
El titular de la Asociación de Restaurantes del Paraguay (Arpy), Oliver Gayet, indicó que hace tiempo se sabía que la posibilidad de que el Estado pague al personal la compensación económica por la pandemia. “Es fundamental para poder sostener esos empleos de alguna manera y poder tener esa gente capacitada dentro de nuestras empresas”, expresó. Además, opinó que quizás nadie creía que sería necesario extender hasta marzo, mes que se cumple un año de la declaración de la cuarentena para evitar contagios masivos del coronavirus.
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Agregó que es importante que esa ley esté vinculada a la posibilidad de utilizar US$ 20 millones de los US$ 100 millones destinados para los cesados y que aún no se desembolsó.
La vocera de la Asociación de Industriales Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Asomipymes), Guillermina Coronel, apuntó a que la ley de la emergencia no fue inclusiva con el sector y más bien benefició a los grandes empresarios. “Prácticamente a nadie de las empresas chicas favoreció, pues como es poco el personal no se le suspendió, se trabajó a a medias pero lo hicieron”, cuestionó. Agregó que también se reportaron inconvenientes para acceder a los créditos, pues los requisitos impuestos por el Banco Central fueron duros para este sector y en cuanto a la flexibilidad para el pago de alquileres, “casi nadie hizo caso a lo que era el 40%”, criticó.