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El Gobierno había otorgado unos US$ 100 millones al Instituto de Previsión Social (IPS) -en concepto de pago de una deuda histórica del Estado con la previsional- para que esta institución la utilice para mitigar el impacto de la pandemia en sus asegurados. Este fondo era distribuido principalmente a compensaciones económicas a los trabajadores cuyos contratos estaban suspendidos debido a las restricciones sanitarias, además de la acreditación por aislamiento preventivo o reposo de COVID-19.
El gerente de Prestaciones del IPS informó que -hasta ahora- ya desembolsaron en las acreditaciones COVID casi US$ 78 millones del fondo otorgado por el Gobierno. “Hoy estamos con 99.766 suspensiones laborales liquidadas, 53.903 aislamientos por COVID positivo y 3.273 reposos por COVID y 1.340 aislamiento por vulnerabilidad. Todo eso representa un gasto de US$ 77.575.573″, sostuvo.
En ese sentido, refirió que el remanente del fondo serviría solo para realizar los pagos hasta el próximo mes de mayo. Además, comentó que se espera que se sumen más trabajadores con contratos laborales suspendidos debido a las nuevas restricciones que entran en vigencia desde hoy.
“Nos queda un remanente de más de US$ 20 millones para el pago de abril más el pago de mayo posiblemente y hasta ahí llegamos. Creo que en abril terminarías pagando unas 25.000 nuevas suspensiones y mayo estará por el orden de los 30.000 así como viene la mano”, declaró.
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Debido a ello, desde la previsional refirieron que necesitan alrededor de US$ 50 millones para poder seguir con las acreditaciones a los trabajadores y los demás asegurados.
Cabe destacar que el IPS viene otorgando estas compensaciones desde el año pasado, cuando se conocieron los primeros casos de COVID-19 en nuestro país, que derivaron en la cuarentena sanitaria más estricta.