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La agente del Ministerio Público, Claudia Aguilera, presentó sus alegatos finales en juicio y solicitó la aplicación de 20 años de privación de libertad para el Dr. Miguel Ángel Cavallo. De la misma forma, la fiscala solicitó que también se le prohíba el ejercicio de la profesión médica. El médico cirujano fue enjuiciado por la muerte de la joven Maylen Analía Romero Ledesma, ocurrida en el año 2020.
Por su parte la querella adhesiva, representada por la abogada Viviana Goralewsky, también solicitó que la pena sea de 20 años de cárcel junto con la prohibición de ejercer la medicina, acompañando de esta forma el pedido hecho por el Ministerio Público.
El Tribunal de Sentencia, presidido por el juez Manuel Aguirre e integrado por Rossana Maldonado y Juan Francisco Ortiz, tras oír los alegatos de la Fiscalía, de la querella adhesiva y de la defensa del acusado, pasará a deliberar y posteriormente emitir su sentencia con relación al caso que se estuvo analizando en las jornadas de juicio.
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Fiscalía acusó por homicidio doloso al médico cirujano
La víctima fue Maylén Romero, una bailarina y fisicoculturista de 22 años, que perdió la vida durante una cirugía de implante mamario realizada el 30 de diciembre del 2020 en el sanatorio Médicis de Asunción.
La presente causa penal que afronta el Dr. Miguel Ángel Cavallo se inició como homicidio culposo, pero la fiscala Claudia Aguilera acusó al galeno por homicidio doloso (dolo eventual) por haber tenido como posible la muerte de Maylen, según todas las circunstancias y la manera en que ocurrieron los hechos.
Según la acusación, el galeno reservó el quirófano para una “cirugía de párpados” sin internación, pese a que la joven iba a hacer un implante mamario. En la ocasión, el propio cirujano informó que oficiaría de anestesiólogo y, para el efecto, indicó que realizaría una anestesia local.
Iniciada la cirugía, la paciente se quejó de dolor, motivo por el cual Cavallo le aplicó más anestesia. Luego de 5 a 10 minutos, la joven empezó a tener una reacción negativa –ronquido y saturación baja– situación que alarmó al enfermero Dionisio Vera, quien pidió interrumpir la cirugía para asistir a la paciente, pero el doctor se negó.
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La acusación fiscal resalta que Cavallo le aplicó tres frascos de lidocaína y otros tres de adrenalina, que él mismo trajo en su maletín. Ante la falta de reacción del ahora acusado, el enfermero llamó al médico de guardia del sanatorio, que manifestó que la joven necesitaba intubación y terapia intensiva de urgencia y que se llamara de inmediato a una ambulancia para su traslado, pues el sanatorio no contaba con UTI. Maylen falleció 10 minutos después de llegar al sanatorio San Sebastián.