ÑEEMBUCU. Resaltaron que esto hace dudar que los administradores locales gobiernen para toda la comunidad como debe ser. Señalaron que se debe deponer este tipo de actitudes para avanzar hacia una sociedad más civilizada y que los intendentes electos no gobiernen solamente para un partido, como dan a entender al izar la bandera colorada en la sede de la institución municipal.
En el distrito de Guazu Cuá fue elegido el colorado César Humberto Sánchez Machado, y en Villa Oliva, Eusebia Ramona Musa Vda. de Franco, de la ANR.
El electorado de Ñeembucú posicionó a 14 intendentes por el Partido Colorado, mientras que el PLRA obtuvo solo 2 municipios. El más golpeado tras la contienda electoral es el diputado liberal Víctor Ríos, quien es uno de los referentes azules más importantes de la zona.
De los 16 distritos del decimosegundo departamento, solo dos tendrán intendentes de la oposición. Se trata de los liberales Jorge Milciades Marecos Veloso, del distrito de Isla Umbú, y Marcial Torres Rojas, de San Juan de Ñeembucú. En los otros 14 distritos, los colorados gobernarán hasta el 2020.
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En Pilar, el candidato colorado Alfredo “Chulo” Stete obtuvo 7.648 votos contra el candidato del PLRA Carlos Enrique Silva con 7.436 votos. Pablo Ríos, de la Alianza Unidos por Pilar, alcanzó 576 votos. Hubo 316 votos nulos y 175 blancos.
En cuanto a la conformación de la Junta municipal, el Partido Colorado aseguró mayoría propia en Pilar, logrando ingresar a 7 concejales del Partido Colorado. Los restantes 5 lugares serán ocupados por ediles del Partido Liberal, con lo que el cuerpo legislativo se vestirá de azulgrana.
La misma relación de fuerza se dio en casi todos los distritos, salvo en los contados casos en lo que se impuso el PLRA.
Los partidos minoritarios lograron resultados paupérrimos, fundamentalmente en la capital departamental, al dividirse en varios frentes.