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Había sido que la transparencia tiene su límite: cuando afecta el financiamiento del proselitismo permanente. Es puro cuento el tema de hacerse de los sensibles públicamente donando insumos para hospitales.
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El Gobierno de vuelta comienza a amenazarle a la ciudadanía con las restricciones por el aumento de casos de covid-19.
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¡Qué fácil es para las autoridades del Ejecutivo asfixiarle a la economía! Total ellos cobran el 100% de su salario y con estabilidad laboral a diferencia de los trabajadores del sector privado que están con el chake de ser suspendidos o despedidos.
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Qué lamentable el silencio de la jerarquía católica. El Gobierno la está utilizando para justificar una represión a los peregrinos, quienes, en uso de sus derechos constitucionales de libre tránsito y de práctica de culto, quieren ir a Caacupé para estar cerca de su protectora.
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La jerarquía tiene todo el derecho de apoyar las medidas sanitarias. Y ha dispuesto el cierre de la basílica y ha exhortado a los fieles a que vivan la festividad desde sus casas, pero lo que no puede permitir es que el Gobierno la utilice como un garrote contra los peregrinos. ¡Qué bárbaro!
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Según Euclides, los dirigentes piqueteros ñandecó le pidieron disculpas por los “excesos”. Estos seudolíderes campesinos tendrían que dirigirse a la ciudadanía trabajadora y no a cepillarle a un ministro o a las autoridades del Gobierno.
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Este Jorge Galeano es un hombre impune del Paraguay por violar la Constitución por el hecho de gozar del respaldo político de algunos legisladores colorados, liberales y del Frente Gua’u. La fiscalía de Sandra Quiñónez tiembla ante este piquetero porque no se anima a imputarle por todo lo que hizo. Pero bien que es valiente “la doctora” para ordenar que se les imputen a María Esther Roa y otros de los miembros de ciudadanos autoconvocados por protestar contra la corrupción.
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Euclides se equivoca cuando dice que la ciudadanía tiene una sensibilidad selectiva porque no se enoja con los médicos cuando se manifiestan frente al Ministerio de Hacienda. Miente para justificarse. ¿De dónde sacó eso? Los médicos no paralizan el tráfico asunceño ni se ubicaron a la largo de 20 cuadras en cada bocacalle.
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Y como broche de oro, ayer la Cámara de Diputados sancionó el vito de US$ 17 millones para las “organizaciones campesinas”. Funcionó el chantaje.