La Agencia Espacial Europea y el Gobierno de Argentina reafirman sus "intereses comunes"

El vicecanciller del país suramericano, Leopoldo Sahores, recibió en la capital argentina al director de Estrategia, Asuntos Jurídicos y Externos de la ESA, Eric Morel de Westgaver, informó el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto en un comunicado.

"La reunión permitió repasar la histórica cooperación bilateral en materia espacial (de la ESA y Argentina), cuyo máximo ejemplo es la Estación de Espacio Profundo DS3 de la ESA en Malargüe, provincia de Mendoza (oeste del país), así como también reafirmar el interés común de continuar profundizando la labor conjunta", detalla el texto.

Está previsto que autoridades argentinas visiten próximamente la Estación de Malargüe, totalmente operativa desde 2013, y que cuenta con dos estaciones hermanas en New Norcia (Australia) y Cebreros (España).

Las antenas de las estaciones de espacio profundo se encargan de la comunicación por satélite con las naves espaciales situadas en el espacio lejano.

La estación argentina fue una de las encargadas de rastrear la actividad de la sonda espacial 'Rosetta', puesta en órbita por la ESA en 2004 con el objetivo de investigar el cometa 67P/Churiumov-Guerasimenko y estudiar este tipo de cuerpos celestes.

'Rosetta' dejó de estar operativa en 2016, cuando llevó a cabo su última maniobra antes de colisionar con el cometa.

Tras su encuentro con el vicencaciller, el representante de la ESA se reunió con funcionarios de otras áreas del Ejecutivo que preside el ultraliberal Javier Milei.

Además de la Estación de Malargüe, Argentina cuenta con la única estación de la Red de Espacio Profundo de China en el continente americano, la Estación de Espacio Lejano de Bajada del Agrio, en la provincia de Neuquén (suroeste del país), inaugurada en 2017.

Recientemente, el Gobierno de Milei, alineado en materia de política exterior con Estados Unidos, anunció que auditará la estación china para cerciorarse de que el país asiático no lleva a cabo actividades militares en la base, como sospecha el país norteamericano y ha desmentido China, que sostiene que sólo se efectúan actividades científicas.