"Uno extrañaba esos partidos, los clásicos, el poder estar ahí aunque sea en el banco alentando o mirando. Los cásicos sabemos cómo se juegan. Son 40 minutos dando el máximo. Lo hacen los dos equipos y las dos hinchadas en cada partido”, afirmó Deck en declaraciones a la plataforma televisiva DAZN, que transmite el máximo torneo europeo de clubes de baloncesto.
Deck explicó que se marchó a la NBA porque quería "vivir una experiencia, una oportunidad que quizás no la iba a tener en otro momento". "Era una decisión que tenía tomada, mis compañeros se enteraron rápido, Pablo (Laso) lo sabía un poco más, y ahora estoy de nuevo aquí, disfrutando", añadió el jugador, que afirmó que su intención "siempre era volver aquí en caso de tener que regresar".
El alero argentino aseguró que durante su paso por Oklahoma, donde apenas pudo disputar 17 partidos entre el final de la temporada pasada y el inicio de esta campaña, no perdió el contacto con los jugadores del Real Madrid. "Estuve hablando todo el tiempo con todos los chicos, nunca perdí el contacto", dijo.
Ahora, con contrato para esta temporada y las dos siguientes, afronta el reto de insertarse en la rotación de Pablo Laso. "Llego a un equipo que ya está armado, en funcionamiento, tratando de insertarme, pero conozco a Pablo, a los chicos que llevan un tiempo, y con los nuevos empiezo a tener más confianza", afirmó Deck.
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