Mientras la Copa Libertadores está al caer, Olimpia volvió a ganar. Fue la tercera victoria en tres partidos oficiales en el semestre después de golear a Sportivo Limpeño en la Copa Paraguay y superar a General Díaz en el Torneo Clausura. El Expreso Decano no se detiene y ahora va por Liga de Quito en los octavos de final del certamen continental.
Mermado por varias lesiones, Daniel Garnero metió mano en el equipo: Luis de la Cruz fue lateral; Carlos Rolón jugó de segundo central; William Candia arrancó en el doble seis con Rodrigo Rojas y Jorge Ortega acompañó a Roque Santa Cruz en el ataque. El resto, entre algodones o descansando para el viaje a Ecuador y el partido del martes contra el equipo de Antonio Valencia.
El primer tiempo fue impreciso para el Franjeado, que pese a tener mayor posesión de balón sufrió cada vez que Nacional se animó a desdoblar. El aspecto verdaderamente negativo para el visitante fue la lesión de Hugo Quintana, quien fue reemplazado por Hernesto Caballero. El Sub 19 sufrió un golpe en la rodilla y abandonó el Defensores del Chaco para realizar estudios en un sanatorio.
Por su lado, la etapa complementaria guardó las mejores emociones del trámite. En 20 minutos, el partido tuvo tres goles con la ventaja para Olimpia, que abrió el tanteador a través de un penal sancionado por el juez de fondo, Fernando López. El árbitro asistente determinó la clara mano de Miguel Paniagua y comunicó a Éber Aquino, quien había marcado tiro de esquina.
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Del 1-0 se encargó Alejandro Silva: carrera lenta hacia el balón y remate colocado hacia el ángulo inferior derecho de Santiago Rojas, quien fue hacia el otro sector de la portería. A los 2 minutos, el campeón se adelantó. Y antes de que el rival pueda reaccionar, el Decano amplió la ventaja: Silva tranguló con Ortega en la cabecera del área y asistió por derecha a Roque Santa Cruz.
El delantero, quien había descargado el balón para el uruguayo en el inicio de la acción, llegó en carrera dentro del área y cruzó el remate al ángulo derecho de Rojas para establecer el 2-0 parcial a los 12'. Fue el mejor momento del Franjeado en el desarrollo hasta que Aldo Bobadilla modificó la zona ofensiva del Tricolor para tener mayor velocidad y desequilibrio.
El ingresó de Leonardo Villagra (por Fernando Romero) permitió al Albo tener salidas rápidas y efectivas de contragolpe. Y poco después, el local descontó y volvió al partido. David Fleitas, a los 20 minutos, encaró por derecha y antes del cierre de uno de los centrales remató a la esquina superior izquierda de Daniel Azcona para acortar la diferencia.
El tanto le dio vida a Nacional, que generó ataques masivos y con mayor claridad. El propio Villagra tuvo una ocasión manifiesta de gol, pero el remate, solo dentro del área, terminó sobre el travesaño luego de cerrar un centro por la izquierda. También, el delantero insistió con un tiro de larga distancia que culminó en las manos de Azcona.
Después de sufrir con las ocasiones desperdiciadas por el local, Olimpia no perdonó en la primera respuesta peligrosa. Esa es la diferencia entre un equipo grande y uno chico. La pelota parada fue el camino para encontrar un resultado tranquilizador: Carlos Rolón cabeceó tras un centro desde la izquierda y estableció el 3-1 a los 84 minutos.