El escándalo de los 52 falsos positivos en el Instituto de Investigaciones en Ciencias de la Salud de la Universidad Nacional de Asunción (IICS) modificó los planes y el presupuesto de la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF) con respecto a los análisis semanales de los planteles de la primera división. Posterior a la Asamblea General Ordinaria, Robert Harrison, quien adelantó que todos los torneos corren peligro y que el torneo Apertura será hasta que las condiciones sanitarias permitan, apuntó al nuevo sistema de estudios de la enfermedad en jugadores, cuerpo técnico y auxiliares.

“Debemos recordar que nosotros dijimos que el cien por ciento de los gastos de los test iban a correr por cuenta de la Asociación. Cuando hicimos los números, los números no daban para que la Asociación pueda gastar el monto total que eso correspondía. De hecho, el doctor Miguel Figueredo y nosotros contamos con los recursos en cuanto a las empresas para poder realizar, por supuesto que hemos llevamos la ayuda de parte de los dos”, comenzó el titular de la APF, que había decidio procesar las muestras de hisopado en el IICS para evitar el alto costo en laboratorios privados.
Pero el caso en 12 de Octubre, Guaraní, San Lorenzo y el grupo de Árbitros, que finalmente confirmó tres positivos de los cincuenta y cinco anunciados erróneamente, obligó a la APF a migrar a una entidad privada. Hasta el momento, el organismo rector del fútbol paraguayo no abona ningún dinero por las pruebas porque es una donación del doctor Miguel Figueredo, quien abrió las puertas del Laboratorio San Roque con el fin de continuar el protocolo sanitario y reiniciar el primer campeonato del año, que sufrió la postergación de la novena jornada.

Pero los test no serán gratuitos hasta que culmine el certamen, ya que será una perdida de dinero para el titular de Sol de América y de Harrison, quien también aporta por el vínculo de la familia con la salud. “Cualquier gasto que podamos llevar adelante de nuestros bolsillos o que pague la Asociación es algo que está todo reglamentado a través los reglamentos de gobernanza e integridad de la Asociación Paraguaya de Fútbol, pero no obstante, todo lo realizado por el doctor Figueredo y por nuestro laboratorio es sin costo para la Asociación, se entendió”, puntualizó el mandamás.
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Las declaraciones de Harrison pueden ser un mensaje a los clubes, que hasta el momento no abonaron por los testeos de la enfermedad. El costo de los diez mil a quince mil dólares que la APF realizaba en el IICS aumentará a ciento veinte o ciento cincuenta mil dólares, un monto que estaría fuera del alcance del ente. ¿Pagarán las instituciones parte o la totalidad de los estudios de coronavirus?

