La “fuga” en pleno torneo se inició con el capitán Aldo Quiñónez, quien pasó a River Plate. En condiciones normales, el Sportivo debería tener mayores recursos que el Kelito, pero es tan malo su manejo que los atletas se marchan en fila. Uno de los mayores problemas es que promete un monto salarial y termina pagando menos de lo establecido.
Yéiber Murillo, Blas Armoa, Isidro Pitta Saldívar y Rubén Escobar integran la lista de los que dejan el club auriazul en pleno Apertura. A estos se sumaría Paulo Lima, el uruguayo que tiene contrato hasta el 4 de octubre próximo. Para los contratos, Luqueño necesita un ajuste de tuerca urgente, porque generalmente los vínculos son hasta fines de diciembre o junio, mitad de temporada.
Jorge Núñez quedó libre y fue a River. El talentoso Luis Ibarra liberó su ficha y trabaja como tractorista en Caazapá mientras aguarda que la ventana de pases se abra. Existen varios atletas marginados con contrato vigente y que recurrieron a la justicia para percibir sus haberes.
El panorama no es alentador para Rodrigo López que se salvó de una derrota por histórico margen con la cual hasta hubiese perdido el puesto.
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Ro-Ro López ya no es el técnico
El plantel del Sportivo Luqueño tenía previsto entrenar en la tarde de ayer, pero no fue así y se supo que el técnico Rodrigo López renunció a pesar de que pelearon en retenerlo. Ro-Ro deja en su foja 11 partidos dirigidos: 3 ganados, 4 empatados y 4 perdidos. Se intentó por todos los medios seguir con él, pero el enojo y la postura fueron gravitantes en este caso.