La remontada ante el Salzburgo de este jueves (2-0, 2-1 en marcador general) no se puede explicar sin mencionar a la 'Joya', un jugador que se está encontrando con su mejor versión de la mano de Mourinho y que es claramente el mejor jugador de la plantilla 'giallorossa'; y sin el factor campo, que suma ya 24 llenos seguidos en los que lleva en volandas a los suyos, especialmente en las grandes ocasiones.
El próximo 9 de marzo, la Real Sociedad vivirá en sus carnes el calor de la grada romana contra un equipo que se siente cómodo sin balón a la espera de una salida rápida, que se apuntala con una sólida defensa de tres centrales y que busca, por necesidad, constantemente la participación de un Dybala que eleva el techo competitivo del Roma.
DYBALA, NUEVO EMPERADOR ROMANO
"Tuve dudas sobre ponerlo o no hasta el final, pero hablé con él y me dijo: 'míster, este partido tengo que jugarlo'", desveló Mourinho en rueda de prensa tras la victoria ante el Sazburgo.
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Solo había entrenado un día desde el partido de ida, en el que tuvo que ser sustituido por problemas musculares. Pero Dybala se siente el líder de este equipo, es consciente de su importancia y quiso arriesgar. Completó la remontada con el segundo gol, y el particular Coliseo del Roma le reconoció el esfuerzo -y el partido- con una nueva ovación cuando fue sustituido a falta de pocos minutos.
CADA VEZ MENOS PROBLEMAS EN ATAQUE, LA PLANTILLA SE ALARGA
Si algo podía generar dudas en el equipo de la capital italiana era su poca efectividad de cara a puerta. Pero que poco a poco se vayan incorporando nombres que proporcionen una solución en ataque está acabando con el principal debe de los de Mourinho.
A los Abraham, Pellegrini y Dybala, intocables e insustituibles, se suman ahora un Belotti ya aclimatado, un Wijnaldum que ha vuelto tras la lesión de Peroné, un Ola Solbakken incorporado en el mercado invernal, un Spinazzola que vuelve a ser aquel carrilero que asombró en la Euro 2020 y un El Shaarawy maduro que vale como revulsivo y como carrilero.
Son jugadores que aportan perfiles diferentes y de los que Mourinho no había podido gozar en su totalidad hasta ahora, algo que ha generado ese plus de cara a puerta y que ha dado la oportunidad al técnico de dar oxígeno y alternativas al ataque.
DEFENSA DE TRES
Algo parecido pasaba con su defensa de tres, pero ésta casi siempre funcionó. Smalling, Mancini e Ibáñez son un 'pack' que ya casi cuesta hasta verlos por separado. Se complementan a la perfección y son la base sobre la que se sostiene el equipo, cubriéndose las espaldas los unos a los otros y siendo jugadores claves en las acciones a balón parado gracias a su altura.
Cristante y Matic son la pareja preferida de Mou para que juegue por delante de los tres centrales, un dúo de características similares, con un corte más conservador que le permite dar alas a los tres de arriba y los dos carrileros.
EL OLÍMPICO COMO FACTOR FUNDAMENTAL
Más allá de lo futbolístico, el conjunto 'txuri-urdin' tendrá que lidiar en el choque de ida con el factor campo. La comunión entre jugadores y afición es total, y se complementa a la perfección. Aparece en los momentos difíciles como apoyo y en los momentos de ilusión como un trampolín gigante hacia el gol.
La Real Sociedad no se va a encontrar con sorpresas contra el Roma. Es un equipo cristalino que se sostiene en la solidez defensiva, que construye a partir de la puerta a cero y aprovecha el balón parado, que no se siente incómodo sin balón y que, con él busca, a Dybala para que genere el peligro.