Triunfo en Montevideo, clasificación y goleada ante Brasil: Argentina no para de celebrar

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2393

Buenos Aires, 26 mar (EFE).- La doble fecha de Argentina en las eliminatorias suramericanas al Mundial 2026 fue mejor incluso de lo que soñaban los más optimistas aficionados. Sin Messi pero con un Julián Álvarez endiablado y el aporte de algunos jóvenes, venció ante Uruguay en Montevideo y aplastó a Brasil en Buenos Aires, sellando la clasificación.

Los dirigidos por Lionel Scaloni demostraron por qué son los vigentes campeones del mundo y bicampeones de América e impusieron su categoría ante de dos de los equipos más fuertes del continente.

Con 31 unidades, lideran la clasificación y aventajan al segundo, Ecuador, por ocho unidades.

A falta de cuatro fechas, 16 puntos lo separan de Venezuela, que marcha séptimo, estaría alcanzando la plaza de la repesca y no tiene posibilidades matemáticas de alcanzarla, por lo que Argentina cierra esta doble jornada ya clasificada a la próxima Copa del Mundo.

En el primero de los dos encuentros, la Albiceleste logró un esforzado triunfo ante Uruguay en Montevideo el pasado viernes.

Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy

Si bien fue claro dominador, el equipo de Scaloni no logró sacar ventaja hasta el minuto 68 de partido, gracias a un implacable remate de larga distancia de Thiago Almada, joven volante del Lyon francés y que se ganó un lugar en el once inicial gracias a las lesiones de Messi y Lautaro Martínez.

Ese encuentro fue también el primer partido como titular con la celeste y blanca de Giuliano Simeone, cuyo gran rendimiento en el Atlético Madrid le permitió imponerse sobre jugadores como Ángel Correa, Alejandro Garnacho y Nicolás González.

Tras el triunfo ante la Celeste, Argentina llegaba al duelo de anoche ante Brasil en Buenos Aires con el sueño de sellar la clasificación al Mundial 2026 mediante un triunfo ante su máximo rival futbolístico.

Sin embargo, el empate por 0-0 entre Bolivia y Uruguay permitió al campeón mundial celebrar la clasificación por anticipado y llegar más relajado al clásico.

Lejos de desconcentrarse, los de Scaloni salieron al campo de juego con el hambre que los caracteriza desde hace años y rápidamente lograron sacar ventaja gracias a un gol de su jugador más peligroso: Julián Álvarez.

Luego llegó el segundo, a través del botín derecho de Enzo Fernández tras una memorable jugada colectiva, y, tras el descuento brasileño producto de un error defensivo, la fiesta en el Estadio Monumental culminó con dos tantos más: uno de Alexis Mac Allister y otro de Giuliano Simeone, que ingresó desde el banco y marcó su primer gol en el seleccionado.

Si bien convocó a varios jóvenes, Scaloni optó por repetir la base de jugadores que utiliza desde hace varios años, y explicó que el buen rendimiento de algunos de los más veteranos ha sido un obstáculo para el recambio generacional.

Uno de los puntos más altos del equipo fue el medio campo, donde Fernández y Mac Allister estuvieron acompañados, como de costumbre, por Rodrigo de Paul y Leandro Paredes, que ayer se alternaron a la perfección las tareas de presión, creación y marcaje, logrando anular las múltiples amenazas ofensivas de Brasil.

"Yo lo que quiero es que la gente disfrute de este presente, de este momento, porque no se sabe cuanto va a durar", dijo Scaloni en la conferencia de prensa posterior al triunfo ante la Canarinha, y destacó que el objetivo de cara a las últimas fechas de las eliminatorias es mantener el nivel y "seguir compitiendo de esta manera".

"Esta eliminatoria no es nada fácil, y haber conseguido la clasificación como la conseguimos es muy meritorio", añadió, y destacó que, ante las ausencias de Messi y Martínez, lo que primó fue el juego en equipo: "Jugamos como un equipo y por eso minimizamos a Brasil. Es la única manera de poder ganarle a este equipo, a estos jugadores, jugando como equipo".

De cara a las últimas cuatro jornadas, se espera que el seleccionador aproveche para dar más minutos de juego a futbolistas jóvenes, con miras a intentar repetir la gloria en el próximo Mundial.