El encuentro entre el Le Havre, que no pudo acercarse a la salvación, y el Marsella de la penúltima jornada de la Ligue 1, tuvo que pararse en el minuto 65 por unos sucesos que comenzaron justo después de que el argelino Amine Gouiri marcara y pusiera al Marsella por delante en el marcador.
Los seguidores del Le Havre acudieron a la zona habilitada para la afición visitante y comenzaron los incidentes con lanzamiento de objetos. Algunos, incluso, saltaron al césped. El árbitro Willy Delajod decidió parar el partido y enviar a los jugadores a los vestuarios.
Uno de los dirigentes del Le Havre se dirigió a sus aficionados por la megafonía del estadio y llamó a la calma a la grada para que el partido se pueda reanudar. Pasados unos minutos y con el ambiente más sosegado, los jugadores volvieron al terreno de juego y el partido se reanudó.
La interrupción le vino bien al Le Havre que pocos minutos después de que el balón volviera a rodar logró el empate. Fue el tanto de Issa Soumare tras recibir un balón de Josue Casimir.
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Pero en el tramo final, el Marsella impuso su talento y en una acción brillante de Greenwood selló la victoria. Recibió un balón de Luis Henrique, se buscó el espacio y desde fuera del área ejecutó un gran tiro imparable para Mathieu Gorgelin.
El decimonoveno gol del exjugador del Getafe en la Ligue 1, solo dos menos que Ousmane Dembele, del París Saint Germain, máximo anotador del torneo, supuso la clasificación para la Liga de Campeones del Marsella, segundo en la tabla, a falta de una jornada para el final del torneo que cerrará en el Velodrome el próximo fin de semana ante el Stade Rennes.
En la última acción del partido, Amine Gouiri redondeó la victoria del Marsella y su objetivo.