La federación inglesa (FA, por sus siglas en inglés) acusó a los aficionados 'hammers' de entonar esos cánticos en un partido de Premier League el pasado 3 de febrero contra el Chelsea en Stamford Bridge y un tribunal independiente decidió multar al club.
El West Ham United admitió los cargos por no controlar a sus aficionados y los suspenderá si consigue identificarlos.
"El club tiene una política de tolerancia cero contra el comportamiento discriminatorio, abusivo o los insultos y esos que sean identificados, además de los cargos criminales que tendrán que enfrentar, serán suspendidos por el club", informó el West Ham en un comunicado.
