Minuto 91. El árbitro del partido cobró un tiro libre a favor de Deportivo Capiatá a unos 40 metros del arco de Cerro Porteño. Miño se encargó del remate y sin dudar pateó con dirección a la portería.
El remate se terminó perdiendo entre las redes del arco de un sorprendido Diego Barreto. Con ese tanto, Deportivo Capiatá se terminó llevando la victoria ante el Ciclón.
“Ahora estuve mirándolo otra vez (el video del gol), no puedo creer que haya viajado a esa magnitud la pelota. No lo quise creer cuando me habían dicho la velocidad, una y otra vez lo estoy viendo en el teléfono”, afirmó Miño en conversación con Radio 970 AM.
El jugador capiateño indicó que cree que Barreto se confió debido a la gran distancia que había desde el punto donde debía lanzar el tiro libre y su arco.
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Aseguró que desde el primer instante su intención era patear directo al arco. “Miré de reojo al banco y el profe me dijo que le pegue fuerte”, agregó.
Relató que el director técnico, Mario Jacquet, les había dicho que Cerro buscaría proponer y que debían mantener la calma para poder contrarrestar eso.
“De a poco fueron entrando en una desesperación lo que nos favoreció a nosotros”, acotó.
“Me agradecieron mucho los dirigentes, los compañeros, pero más agradecido soy yo porque ellos fueron los que desde el primer minuto entraron a jugar. Yo entré diez o quince minutos que me tocaron hacer dos remates buenos”, sentenció.
