Y al final, el grito fue azulgrana

Los clásicos rivales se enfrentaban en busca de ganar el título de campeón del Apertura luego de los resultados registrados el miércoles pasado en la penúltima fecha. El Decano perdió ante Luqueño y el Ciclón derrotó a Sol de América.

Gerardo Pelusso no puso a Pablo Zeballos desde el principio. Julio César Cáceres ingresaba en la zaga para formar una línea de tres con Nájera y Candia. Atacaban Biancucchi y Caballero en el franjeado.

Jorge Fossati puso en el arco a Diego Barreto, ausente desde el partido ante Nacional por aquel golpe por el palo derecho. Jorge Rojas era otra novedad en reemplazo de Luis Cáceres.

El primero en llegar fue Cerro Porteño por el sector de Jorge Rojas, que recibió un gran pase de Julio dos Santos y ganó en velocidad a Sebastián Ariosa. Fue oportuno el cruce de Salustiano Candia para enviar el balón al córner, que no trajo consecuencias. A los dos minutos, una buena pared entre Fabbro y Édgar Benítez estuvo cerca de llegar al objetivo de los azulgranas.

Luego de estos ataques de Cerro Porteño, Olimpia comenzó a salir y generó dos tiros de esquina. Cerro no podía salir y el Decano se aproximaba hasta el arco de Barreto. Richard Ortiz tuvo la posibilidad de tirar desde fuera del área. El balón salió muy cerca del palo izquierdo azulgrana.

A los 8 minutos cambiaron las cosas en el partido: el balón llegó hasta el medio sector y saltaron por el mismo Luis Caballero y Walter López. El uruguayo le puso el codo en la cara al de Olimpia y Carlos Amarilla, que estaba muy cerca de la acción, no dudó para sacarle la roja directa al jugador de Cerro Porteño.

Luego de la expulsión de López, Jorge Fossati ordenó que Ëdgar Benítez ocupe el sector dejado por el uruguayo, pero minutos después mandó a Jorge Rojas como lateral por derecha para hacer una línea de cuatro, subiendo un poco más Benítez, que no podía con Revoredo y Aranda.

Pero a los 18 minutos se vino un choque entre Caballero y Rojas. Carlos Amarilla exhibió la amarilla al olimpista e inmediatamente después, cuando el balón llegó a la zona derecha de la defensa de Olimpia, Revoredo rechazó el balón y su pierna derecha dio en Édgar Benítez. Amarilla equilibró el partido porque expulsó al peruano con roja directa.

Cerro Porteño era el que más tenía la pelota en su poder, llegaba con toques entre Benítez, Fabbro y Dos Santos. Olimpia generaba peligro las veces que Biancucchi tomaba la pelota. Richard Ortiz era el que probaba desde fuera del área.

A los 29 minutos, Richard Ortiz apareció por detrás de Jorge Rojas, que estaba actuando como lateral derecho; del desborde vino el centro que llegó hasta Eduardo Aranda, que agarró el balón como venía forzando la primera buena intervención de Diego Barreto hacia su palo izquierdo.

A los 35 minutos se vino una jugada por izquierda entre Édgar Benítez y Jonathan Fabbro, el “Pájaro” recibió la devolución y al entrar al área Francisco Nájera le chocó por atrás, Benítez cayó y Amarilla marcó el penal. Santiago Salcedo se encargó de cambiar por gol con un remate al costado derecho de Martín Silva.

Olimpia salió en busca del empate pero no estaba preciso en el toque final cerca del área de Diego Barreto. La segunda etapa se inició con un cambio para el Decano: Pablo Zeballos reemplazó a Francisco Nájera.

El Decano comenzó yendo para adelante ahora atacando con tres jugadores: Zeballos, Biancucchi y Caballero, pero Cerro Porteño llegaba con peligro aprovechando la salida de Nájera y llegando por la izquierda de su ataque donde se tiraban Fabbro y Benítez.

A los 55 minutos, Carlos H. Paredes reemplazó a Miguel Amado en un tiro de esquina favorable a Olimpia. Vino el centro, Paredes cabeceó y anotó el tanto, pero el línea anuló el gol de Olimpia por posición adelantada de Maximiliano Biancucchi. Amarilla anuló y se vino la protesta de los jugadores franjeados. Olimpia apuraba en busca de la igualdad. Cerro se defendía.

Jorge Fossati también realizó un cambio: sacó a Jorge Rojas para poner a José Domingo Salcedo. “Mingo” se posicionó a la izquierda y César Benítez pasó a ocupar la zona derecha de la defensa cerrista.

A los 65 minutos, Eduardo Aranda le hizo la falta a la entrada del área a Santiago Salcedo, minutos antes estrelló el balón al travesaño. De la falta se encargó Jonathan Fabbro, que colocó el balón como con la mano por encima de la barrera para anotar el segundo gol de Cerro Porteño para el delirio de sus parciales, que se sentían campeones a esa altura.

Pero Olimpia siguió yendo para adelante a pesar del hombre menos que tenía tras la expulsión de Eduardo Aranda. El Decano, con gran amor propio, se fue hacia la valla de Barreto y el descuento llegó a los 75 minutos a través de Arnaldo Castorino, que definió ante la salida de Barreto tras un pase de Paredes.

Cerro esperaba y salía de contragolpe, tuvo la posibilidad de aumentar con un disparo desde fuera del área de Santiago Salcedo que pegó en el travesaño de Silva, que ya estaba vencido. Salcedo también tuvo un tiro libre que no pudo aprovechar desde una muy buena posición, casi similar desde donde vino el gol de Fabbro.

Olimpia buscaba de todas las formas posibles pero no pudo llegar al empate que le pudo dar el bicampenato. En un intenso final, Cerro Porteño se consagró campeón del fútbol paraguayo por vigésimo novena vez en su historia.