La cuatro veces medallista mundial fue sometida a un control fuera de competición el 26 de junio de 2019, que arrojó un resultado positivo por el anabolizante prohibido 'ligandrol". Su federación le impuso una inhabilitación de cuatro años, que la nadadora recurrió ante el arbitraje local, que se la redujo a dos.
En diciembre de 2020 la SIA y la AMA presentaron al TAS los recursos que ahora han sido desestimados, bajo el argumento de que Jack demostró, con un porcentaje suficiente de probabilidades, "que no había consumido la sustancia prohibida de forma intencionada o temeraria y que, por lo tanto, podía beneficiarse de una reducción del período de inhabilitación de cuatro años a dos".
Shayna Jack, de 22 años, tiene dos platas y dos bronces mundiales ganados en pruebas de relevos en 2017.
