“Estoy muy feliz con la tercera plaza. Di todo lo que tenía hoy y no me arrepiento de nada. Sé de donde vengo en los últimos tres años para terminar tercero en una de las etapas más duras del Tour, puedo estar muy feliz con eso", dijo el ciclista británico de origen keniano.

Froome fue uno de los protagonistas de la escapada del día, a la que se uniò junto a su compatriota Thomas Pidcock en el kilómetro 60, cuando 7 hombres ya marchaban por delante.

Pidcock fue el más fuerte en el ascenso al Alpe D'Huez y entró en solitario, con una ventaja de 48 segundos sobre el sudafricano Louis Meintjes (Intermarché) y de 2.06 respecto a Froome, quien "regresó" a la primera plana del Tour.