Como ocurrió en las eliminatorias a los mundiales de Sudáfrica 2010, Brasil 2014 y Rusia 2018, la selección boliviana de fútbol repitió el penúltimo puesto en la clasificatoria sudamericana a Qatar 2022 con tan solo cuatro triunfos y tres empates logrados al mando del venezolano César Farías.
El único orgullo boliviano fue tener en sus filas al máximo artillero de las eliminatorias, el internacional Marcelo Martins Moreno, que anotó 10 goles, superando por dos al brasileño Neymar y al uruguayo Luis Suárez y por tres a los argentinos Lionel Messi y Lautaro Martínez.
Se espera que soplen vientos de renovación en 2023 con la llegada de Gustavo Costas a la Verde, en cuyo banquillo el argentino se estrenó oficialmente en el amistoso disputado en noviembre con Perú que terminó con una derrota por la mínima cuenta ante los de Juan Reynoso.
Bajo el mando de Costas, Bolivia buscará volver después de 30 años a un mundial, el de 2026 que organizarán en conjunto Canadá, México y Estados Unidos.
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En el fútbol femenino, Bolivia perdió sus cuatro partidos en la Copa América, mientras que en fútbol sala las jugadoras del Always Ready quedaron en quinto lugar en la Copa Libertadores femenina jugada en Cochabamba.
Los equipos masculinos tampoco tuvieron un paso destacado por la Copa Libertadores ni la Sudamericana.
Sólo el The Strongest tuvo algo más de margen en estos torneos al quedar tercero en su grupo de la Libertadores, lo que le permitió pasar a octavos de la Sudamericana, aunque quedó fuera al caer por 1-2 y 3-0 ante el Ceará brasileño.
En la División Profesional boliviana, el Bolívar se coronó campeón del torneo Apertura, mientras que el Clausura fue cancelado a falta de seis fechas para su culminación por los conflictos sociales en el este boliviano.
El Clausura acabó sin un campeón proclamado, con The Strongest como líder con 53 puntos; seguido de Always Ready de El Alto con 51 y Bolívar con 50.
Los representantes de Bolivia en la Libertadores serán el Bolívar, The Strongest, Always Ready y Nacional Potosí, y los cupos para la Sudamericana fueron para Oriente Petrolero, Guabirá, Palmaflor y Blooming.
Una de las particularidades del campeonato local será el acento español que tendrá el derbi boliviano entre el Bolívar y The Strongest, los rivales tradicionales que están dirigidos por los hispanos Beñat San José e Ismael Rescalvo, respectivamente.
OTRAS DISCIPLINAS
Bolivia demostró que uno de sus fuertes es el ráquetbol gracias a Conrrado Moscoso, que se coronó como campeón mundial de ese deporte, una situación inédita en el país.
Esto le permitió situarse como el número uno en el ranking masculino individual de la Federación Internacional de Ráquetbol y en tercer puesto en el Tour Internacional de Ráquetbol (ITR en inglés).
Pese al esfuerzo realizado por muchos atletas, el país terminó entre los últimos lugares en los Juegos Suramericanos de la Juventud disputados en Rosario, los Bolivarianos de Valledupar y los Suramericanos en Asunción.
En Rosario se lograron once medallas, una de oro, cuatro de plata y seis de bronce, mientras que en los Bolivarianos fueron 14, dos doradas, seis plateadas y seis bronces.
En Valledupar brilló el atleta Vidal Basco, que ganó el oro en la competencia masculina de 10.000 metros, y luego fue el abanderado en los Suramericanos en Asunción, aunque no logró subir al podio en ese certamen.
Aunque el ráquetbol es su fuerte, Bolivia no pudo mostrar ese dominio en los Juegos Suramericanos, ya que ese deporte no fue incluido en la competición.
El tenis salvó la presentación boliviana en Asunción con las medallas de plata logradas en dobles masculino por Boris Arias y Federico Zeballos y en mixtos también por Federico junto a su hermana Noelia Zeballos, a lo que se sumaron seis bronces en atletismo, boxeo y fútbol sala femenino.
Las ocho medallas obtenidas en los Suramericanos son uno de los resultados más flojos de Bolivia desde la primera edición de los juegos.