”La Milán-San Remo es una carrera hermosa. Conozco bastante bien las carreteras: no vivo muy lejos y, a veces, en los entrenamientos, voy a subir el Poggio. He imaginado muchos escenarios en mi cabeza de cómo puede ir la carrera y tengo claro que es una de las más difíciles de ganar", ha señalado Pogacar.
El ciclista de Komenda se está recuperando del esfuerzo de la París Niza y acudirá a la "Classicissima" rodeado de un potente equipo que completan Alessanddro Covi, Davide Formolo, Feliz Grosschartner, Domen Novak, Matteo Trentin y Diego Ulissi.
"Después de una gran semana en la París-Niza, ahora me estoy recuperando un poco y preparándome para el gran fin de semana. Tenemos un equipo fuerte y estamos compitiendo bien juntos, así que creo que tendremos algunas opciones diferentes para el final”, concluyó.
