Arian Carrillo culminó el cuarto año de la carrera Artes Visuales, en el Instituto Superior de Artes “Olga Blinder” (FADA/UNA) y para el año próximo ya le aguardan varios proyectos para desarrollar su visión artística.
Gracias al primer puesto que obtuvo con su obra “(entretelas)” en el premio Oxígeno, el año que viene presentará una exposición en Hive Coworking.
También seguirá con el proyecto “Invernadero”, que inició este año en el Centro Cultural de España Juan de Salazar, siendo parte de un colectivo de artistas trans.
Arte autorreferencial
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Arian manifestó que en este momento su obra es muy “autorreferencial”, y que hace unos años se metió de lleno a hablar sobre la identidad trans, porque siente que “había problemáticas de las que nadie se estaba preocupando”, sobre todo en las artes visuales.
Recordó que para el premio Matisse, al que se presentó el año pasado, trabajó haciendo una intervención sobre su cédula de identidad. Trabajos de esa misma serie, se presentaron también en la Bienal Internacional de Arte Siart Bolivia y en el Museo del Barro.
“Siempre rodeo esa temática de cuerpo e identidad, que igual muchas veces ya se tocó, pero siento que pueden haber otros giros para llegar de otra manera”.
Otro tema sobre el que Arian habla es la “transmasculinidad”, algo que la gente “ni siquiera sabe qué es y no te reconoce tampoco”, señaló. Carrillo afirmó que lo que quiere recordar es que lo que hace “no es meramente arte trans” sino “arte hecho por una persona trans”. Resaltó así el hecho de poder llegar ahora, con los reconocimientos, a “un montón de gente”.
Arian detalló también que el trabajo que hizo para crear su obra “(entretelas)” surgió porque ya venía usando “la ropa como metáfora”.
También encontró que la palabra entretela tenía que ver con los “momentos íntimos o lo que pasa en lo más privado”. Así, habló de cuestiones que le rodean, como “una especie de geografía personal”, en una serie de dibujos.
Ganar le “sorprendió y no”, porque por más que “no tenga trayectoria” dijo que “sabe lo que vale” su obra. En ese camino sigue también trabajando con sus amistades, a quienes considera sus referentes, como Bastion, Nico Domínguez o Amoral, con quienes también proyectan hacer una exposición a la intemperie el año próximo. Al decir de Arian, el arte no debe ser visto “solo en vitrinas”, sino también “afuera”.
Instó a todo artista, ya sea emergente o que está dando sus primeros pasos, a que no tenga miedo de mostrar su obra, o si no “siempre van a ser las mismas personas” y “no van a haber caras nuevas” en el mundo del arte.