Fue el equipo de Luqueño el que salió a proponer, ocupó bien la cancha, buscó ser bien vertical, ganar en velocidad por los costados, por derecha con Blas Armoa y por izquierda con Valdeci Moreira.
El Sportivo movió bien la pelota, con Luis Miño y David Mendieta en el armado, llegó con profundidad, pero mal en la definición.
Sanguinetti, el técnico de Sol, rápidamente envió a la cancha a Pardo por Aldo Cubilla por derecha, para tener más marca y tratar de cerrar las subidas de Armoa. El cuadro de Villa Elisa, las veces que tuvo posesión trató de ser rápido y buscó sorprender la última línea defensiva del rival.
Un agarrón de Mendieta a Pardo dejó pasar el árbitro Arnaldo Samaniego y en la contra Luqueño estuvo cerca del gol, un cabezazo de Armoa que salió sobre el travesaño.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
En la segunda parte el trámite fue más equilibrado, el Auriazul ya no fue tan intenso, decayó físicamente y las ideas se fueron esfumando.
Los entrenadores recurrieron a las bancas para dar frescura al equipo, pero tampoco aportaron mucho los que ingresaron.
Una buena jugada colectiva entre Jourdan y Vera, dejó al primero solo frente al arquero de Luqueño, quien en gran reacción desvió el potente remate.
El equipo de Torres también dispuso de ocasión, solo que Ortiz remató mal desde una buena posición. En los minutos finales, los equipos buscaron llegar al gol, pero con pocas ideas. Cuando el juego finalizaba, Miño marcó para Luqueño, pero estaba adelantado.