El primer contacto de la directiva con Antony no fue positivo, pero en el club no pierden la fe. La intención de llegar a un arreglo está, aunque ahora esperan una ayuda del otro lado. ¿Qué pasará de no llegar a una solución? Habría una conciliación en el mes de junio.
Silva, por ahora, no da el brazo a torcer y, a diferencia de sus compañeros, buscaría evitar cobrar la deuda a largo plazo.
(Fuente, diario Olé)
