Mientras, por la misma vía, el titular de Luqueño, arquitecto Santiago Villagra, respondió que “los jugadores no están cuidando el prestigio y alguien tiene que pagar los platos rotos”, y denunció que el citado futbolista habría recibido amenazas de los hinchas.
“La decisión de separarlo (a Bogado) ya está tomada. Es como llorar sobre la leche derramada”, acotó Villagra y dejó caliente la relación con los hinchas.