Tras la reciente colocación de bonos soberanos, el Estado otorgará a la INC un crédito de US$ 67 millones para inversiones, tanto nuevas como las iniciadas hace casi cuatro año, durante la administración de Optaciano Gómez Verlangieri.
En este último caso, los contratos fueron firmados sin calce presupuestario, otorgaron millonarios anticipos y luego ya no hubo dinero para seguir con los proyectos, por lo que hasta la fecha sigue paralizada (ver cuadro).
Uno de los contratos se firmó con la empresa FL Smith, para el cambio de combustible del horno de clínker ubicado en Vallemí. Según Méndez, este documento está a consideración de Contrataciones Públicas, cuyo parecer legal esperan.
La idea es que en lugar de fueloíl el horno utilice carbón vegetal, mineral o coque, ya que sumado a otras inversiones previstas, la estatal ahorraría US$ 30 millones al año. Para Méndez, lo ideal sería continuar con el contrato firmado, teniendo en cuenta que ya se otorgó US$ 5 millones de anticipo.
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El contrato con Claudius Peters para la instalación de una nueva enfriadora en Vallemí también está en “stand by”, apuntó el titular de INC. La empresa recibió un anticipo de US$ 1.910.400 y también pagos financiados que, en total, suman US$ 1.626.977.
El de Haver & Boecker para instalar dos embolsadoras en Villeta está concluido, luego del pago en cuotas del monto total de inversión, que fue de US$ 7.045.348.
El plan de optimización de la molienda de cal agrícola en Vallemí, para lo cual se firmó contrato con la firma Daca, busca otro lugar donde se pueda instalar la planta, ya que inicialmente Gómez Verlangieri dispuso que sea en la zona de Tres Cerros, pero fue imposible por tratarse de una reserva natural. Ahora también se está negociando un nuevo precio, de modo a que sea más barato, explicó Méndez.
En cuanto a las nuevas inversiones, señaló que todas se realizarán por licitaciones y las más grandes incluirán precalificaciones, como el caso de la secadora de puzolana. En su mayoría, se usará el sistema de subasta a la baja. Agregó que ninguna parte del dinero a recibir se usará para salarios ni compra de materia prima.