El gremio señaló que estos principios son: acordar sobre el nivel de presión tributaria, unificar criterios a efectos comparativos con los países referentes de la región dado que el promedio está distorsionado por los grandes vecinos.
También no distorsionar la economía y no afectar la competitividad país, realizar un análisis del impacto previo de los cambios a ser acordados en cada tributo; no aumentar tasas y dejar claro el nivel real de las tasas actuales, el triple 10 no refleja hoy el nivel real de las tasas.
Asimismo, privilegiar y promover la inversión, revisar el proceso de devolución del IVA para hacerlo más eficiente, revisar el diseño institucional de la administración tributaria para asegurar la recaudación y el combate efectivo a la informalidad y evasión.
La CNCSP insistió en que el diálogo y el acuerdo es el camino para lograr mejores tributos, donde se privilegie la equidad tributaria y paguen todos los sectores por igual, se eliminen privilegios y se combata efectivamente la informalidad y la evasión.
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Además, ratifica que no se opone a los cambios que se enmarquen dentro de estos principios y espera que cualquier aumento en la recaudación, producto de estos cambios sean destinados al desarrollo del país, al bienestar de cada uno de los paraguayos y no al despilfarro y la corrupción.
La posición del gremio surge porque en Hacienda habrían hablado de la modificación del IRP, cuando en la Comisión Técnica Económica Tributaria, que revisa la ley, no se abordó el tema.