LONDRES (AFP). Los dirigentes de la UE han repetido siempre que no reabrirían el acuerdo de divorcio concluido en noviembre con Theresa May, quien se vio obligada a renunciar tras el rechazo de este texto por parte de los parlamentarios británicos. En cambio, están abiertos a cambiar la declaración política adjunta al acuerdo, que sienta las bases de la futura relación entre el Reino Unido y la UE tras el brexit.
Boris Johnson reclamó en particular “la abolición de la salvaguarda” irlandesa, destinada a evitar la reimposición de controles en la frontera entre la provincia británica de Irlanda del Norte y su vecina, la República de Irlanda, tras el brexit.
“Inaceptable”, retrucó el negociador de la UE Michel Barnier, usando el mismo vocabulario que Johnson.
Johnson prometió, pase lo que fuere, salir de la UE antes del 31 de octubre, para hacer de su país “el lugar más genial del mundo”, tratando de alejar las predicciones pesimistas en caso de “no deal”.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Escenarios posibles
UE cede a Johnson: los dirigentes de la UE aceptan finalmente un nuevo acuerdo de retiro sin la famosa “salvaguarda” destinada a evitar la reimposición de controles en la frontera entre la provincia británica de Irlanda del Norte y su vecina la República de Irlanda, tras el brexit. Ese escenario, que permitiría evitar las consecuencias económicas temidas de un divorcio brutal, parece poco probable.
Brexit sin acuerdo: las dos partes no llegan a un entendimiento y Reino Unido sale de la UE sin acuerdo de retiro, un escenario para el que Johnson se dice preparado: prometió dejar al bloque pase a lo que pase el 31 de octubre, fecha de salida dos veces pospuesta. “El Reino Unido está mejor preparado para esta situación de lo que muchos piensan”, afirmó Johnson.
El Parlamento británico es, sin embargo, mayoritariamente hostil a una salida sin acuerdo. Para imponer el “no deal”, Johnson podría decidir suspender el Parlamento, impidiendo que los diputados se pronuncien. Pero esa iniciativa provocaría una crisis política.
Referendo: el Partido Laborista (opositor) quiere que los británicos puedan expresarse a través del “voto público” sobre el brexit o en legislativas anticipadas. Para algunos analistas, sería “un terrible error” convocar elecciones, al señalar que los conservadores apenas alcanzan 25% de las intenciones de voto.
Referendo que llevó al brexit
Con migración, seguridad y economía como temas de fondo, los británicos, convocados en junio de 2016 para un referendo, decidieron dar por terminados –con 52% de los votos a favor y 48% en contra– los 45 años de integración con la Unión Europea.
Desde entonces, el país vive en medio de sobresaltos en su avance hacia el brexit.
Los liberal-demócratas y otras fuerzas proeuropeas llamaron en varias ocasiones a convocar un segundo referéndum, asegurando que los electores británicos no conocían todas las implicaciones en junio de 2016, cuando el brexit se impuso por cuatro puntos porcentuales de diferencia.
