También con el respaldo de su gran aliada, Cuba, la dictadura más antigua de América.
Así como de Venezuela y el régimen fundamentalista de Irán, señaló Aguirre Sacasa.
“Él (Ortega) piensa que con La Habana, Caracas, Teherán y Moscú, tiene donde maniobrar”, indicó.
Recordó que durante el primer Gobierno sandinista (1979-1990), que también encabezó Ortega, Nicaragua perteneció al llamado Movimiento de Países No Alineados y por eso el mandatario “piensa que en el juego de ajedrez geopolítico cuenta” con el apoyo de Cuba y Venezuela, más el respaldo de Rusia e Irán que le permite ganar tiempo en medio de la crisis.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Aguirre Sacasa no descartó incluso que Nicaragua restablezca relaciones con China comunista, debido a que Pekín está apoyando a su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, en medio del conflicto en ese país.
En ese escenario, a juicio del político opositor, la debilidad del mandatario nicaragüense es que deja en manos de Rusia su futuro.
“Ortega debería recordar lo que le pasó a finales de la década de los años 80” cuando se libraba una guerra civil en Nicaragua, y el entonces canciller soviético, Eduard Shevardnadze, tras negociaciones con EE.UU., obligó a los sandinistas a que buscaran un arreglo político.
El mandatario “tiene que reconocer que él no maneja el ajedrez geopolítico, simplemente es un peón”, aseguró.
