El supuesto delincuente favorecido por la agente del Ministerio Público es Hugo Gabriel Romero, de 25 años de edad, quien fue arrestado por policías de Robos y Hurtos del departamento de Investigaciones de Asunción.
Romero cayó el domingo de noche cerca de su casa, en el barrio Barcequillo de San Lorenzo, luego de dos semanas de búsqueda.
El joven compareció ayer en la Unidad Penal 1 de la Fiscalía Barrial 7 de Asunción, donde sin mayores trámites recuperó su libertad.
La titular de la causa, Teresa Ruiz Díaz, ordenó que el presunto maleante ya ni regresara a la base de Investigaciones de Asunción, tal como sucede habitualmente para que los procesados sean fichados antes de ser enviados a sus casas.
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Los agentes policiales se quejaron de que hicieron un gran esfuerzo para arrestar a su objetivo y, al final, la fiscala ni siquiera tuvo en cuenta una prueba científica contundente que comprometía al joven.
Se trata del resultado emitido por el Sistema Automatizado de Identificación Dactilar (AFIS), operado por expertos en Criminalística, que confirmó que las huellas de Hugo Gabriel Romero quedaron impregnadas en la camioneta Toyota Hilux negra que fue atracada en la noche del 29 de junio pasado cerca del club Rubio Ñu del barrio Santísima Trinidad de la capital.
Aquel golpe, que fue filmado por cámaras de seguridad, fue cometido por dos tortoleros, uno de ellos con las mismas características físicas de Romero.
Sin embargo, en el momento de su detención, dos semanas después del robo, el sospechoso ya presentaba el pelo corto. La fiscala habría alegado que la prueba de la Policía no es suficiente elemento. Intentamos conocer la versión de Ruiz Díaz, pero ni los funcionarios de Prensa de la Fiscalía pudieron localizarla.