Narcos acaparaban el pabellón vip que fue redescubierto en Tacumbú

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La “celda” de Cucho Cabaña es la más lujosa. Tiene un fino  placar para clasificar sus costosas ropas.
La “celda” de Cucho Cabaña es la más lujosa. Tiene un fino placar para clasificar sus costosas ropas.

De los 10 reclusos que ocupaban el pabellón vip construido por Jarvis Chimenes Pavão y que ahora fue redescubierto en la cárcel de Tacumbú, nueve son narcotraficantes y el otro es un vaciador de una financiera.

El cómodo y hasta lujoso sector vip del penal de Tacumbú, que fue desmantelado en 2016, cuando desalojaron del lugar a su constructor Jarvis Chimenes Pavão, fue intervenido nuevamente el viernes último.

El director de la prisión, Jorge Fernández, tuvo que renunciar al ser señalado como el responsable de permitir semejantes privilegios. Llamativamente, todos los reos que vivían en el sitio son de alto poder económico y, evidentemente, pagaban por sus lujos.

Esta es la lista de los convictos favorecidos.

Fredy Ariel Irala Fernández (35), narcotraficante

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Detenido el 12 de julio de 2019 en Capitán Bado, en el operativo “Django” de Crimen Organizado de la Policía Nacional. Lico’i, como es conocido, era hasta ese momento el principal productor de marihuana en esa región fronteriza entre Paraguay y Brasil.

Carlos Antonio López Ibarra (44), narcotraficante

Capturado el 3 de julio de 2019 en Villeta, tras una investigación de la Senad en la que se descubrió que había reactivado su estructura de envío de marihuana a Chile, a través de Argentina, pese a que acababa de completar una pena de 12 años por el mismo hecho, tras ser arrestado en 2005.

Reinaldo Javier Cabaña Santacruz (34), narcotraficante

Capturado el 6 de setiembre de 2018 en Ciudad del Este, en el operativo “Berilo” de la Senad que tumbó la última gran organización de tráfico internacional de cocaína y lavado de dinero que operaba en la Triple Frontera y que era dirigida justamente por “Cucho”, como lo apodaron.

Florencio Miguel Resquín Almada (27), narcotraficante

Arrestado el 24 de octubre de 2017 en Ciudad del Este, en la operación “Azabache” de la Senad. Florencio era supuestamente el encargado de “cocinar” la cocaína que su jefe Hugo Enrique Fanego Duarte (también preso) vendía en la Triple Frontera.

Mario Eusebio Romero (31), narcotraficante

Arrestado el 24 de octubre de 2017 en Ciudad del Este, en la operación “Azabache” de la Senad. Mario era supuestamente el guardaespaldas y hombre de confianza de Hugo Enrique Fanego Duarte (también preso), quien vendía cocaína en la Triple Frontera.

Octavio Vargas Muñoz (38), narcotraficante

Condenado a 15 años. El colombiano fue aprehendido el 6 de junio de 2015 en Lambaré, tras una investigación de la Senad que permitió la captura de otro colombiano y de una paraguaya (también condenados). El grupo “cocinaba” y luego vendía cocaína a mediana escala en nuestro país.

Lorenzo González Meza (37), narcotraficante

Penado a 12 años. Fue arrestado el 1 de octubre de 2013 en Asunción, en un trabajo de Antinarcóticos de la Policía Nacional en el que se incautaron 10 kilos de cocaína. Integraba una red que decía ser parte del PCC y que movía 400 kilos de la droga cada mes en la frontera.

Gilberto Ramón Caballero Galeano (40), narcotraficante

Condenado a 29 años y 6 meses. Fue apresado el 10 de noviembre de 2012 en La Paloma del Espíritu Santo, en la famosa operación “Águila Negra” de la Senad, que derivó en la incautación de 1.748 kilos de cocaína, por entonces la entonces mayor carga en la historia del país.

Fermín Centurión Godoy (42), narcotraficante

Condenado a 21 años. Cayó el 4 de noviembre de 2011 en Ciudad del Este, en el megaoperativo “Roca” de la Senad, que tumbó incluso al líder del grupo, Tomás Rojas Cañete, alias Toma’i, quien en esa época controlaba la mayor parte del tráfico de cocaína desde la Triple Frontera.

Basilio Sebastián Muñoz López (37), estafador

Sentenciado a 10 años. Fue apresado el 12 de agosto de 2009 en Asunción, cuando se descubrió un faltante de más de G. 4.300 millones en la sucursal de la financiera El Comercio de Itacurubí del Rosario, donde él era gerente. Al final, se descubrió que en realidad fue un desfalco.