El detenido resultó ser José Gabriel Espínola Lezcano, de 25 años, quien cayó el miércoles último cuando llegaba a su casa ubicada en la zona del Shopping San Lorenzo, en la ciudad del mismo nombre.
El joven estaba en violación de la medida de arresto domiciliario que le habían concedido después de que fuera capturado casi por casualidad el 25 de julio del año pasado en la zona de Calle’i, en posesión de un revólver calibre 32.
José Gabriel había sido arrestado cuando eso por policías del Grupo Lince que cubrían los posibles puntos de escape de una banda criminal cuyo aguantadero estaba siendo allanado en ese mismo momento.
Aquella gavilla desbaratada era comandada justamente por la novia de José Gabriel, Anatalia Cabañas Florenciano, alias Muñeca, quien cayó presa junto a su hermano Pedro Cabañas Florenciano y otro vecino de nombre Higinio Alejandro Fernández.
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Muñeca y su grupo eran buscados en esa época por una serie de asaltos, entre ellos el que ocurrió dos semanas antes, el 10 de julio de 2019, cuando murió de un tiro en el pecho el joven Carlos Emmanuel Ortiz Haceitel, de 27 años.
Este era un estudiante del último año de la carrera de Veterinaria, que de hecho ya trabajaba como tal, y que fue asaltado y baleado cuando regresaba a su casa luego de una jornada laboral.
Los policías de Investigaciones del departamento Central, que atraparon a Muñeca y su grupo, estaban convencidos de que uno de los dos revólveres calibre 32 incautados del poder de ellos iba a coincidir con el arma utilizada para matar al joven veterinario.
Sin embargo, el departamento de Criminalística brindó una gran sorpresa al revelar que el revólver que mató a Carlos Ortiz, en realidad, es el que fue incautado casi por casualidad del poder del ahora detenido José Gabriel Espínola Lezcano. Este último, por lo visto, salió de la casa de Muñeca momentos antes de aquel allanamiento, pero cayó cuando se alejaba con el arma homicida. Para la Policía, José Gabriel y Muñeca fueron los que mataron al veterinario.
José Gabriel fue localizado luego de que una de sus hermanas cayera en una trampa de los policías de Investigaciones, quienes para sacarle la información utilizaron un perfil de Facebook con la foto de un joven apuesto.