Fuentes judiciales indicaron que el africano, procesado por operaciones fraudulentas por computadora, alteración de datos relevantes para la prueba y manipulación de graficaciones técnicas, pretende eludir el juicio oral mediante el planteamiento de una salida alternativa.

Kamga cayó el 21 de noviembre de 2010 en Clorinda, Argentina, con G. 180 millones y 76.000 pesos argentinos, y fue extraditado el 1 de agosto de 2012.

Además, se encontró en su poder una maleta que contenía microchips, pendrives, tarjetas de crédito a su nombre y también en blanco, pero magnetizadas, entre otras evidencias.

Otra de las pruebas con que cuenta la fiscalía es el vídeo de circuito cerrado del Banco Itaú de Mcal. López, en que se lo ve presuntamente instalando lectores (“skimmer”) que copian datos de tarjetas magnéticas para clonarlas.

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