Consideró importantes las críticas realizadas a las autoridades nacionales y el cambio reclamado por el prelado. “Ojalá que se apliquen los cambios”, destacó al comentar que llegó hasta la Basílica en pago de una promesa personal realizada a la Virgencita de los Milagros.
Espínola comentó que pudo recibirse de contador público, lo que motiva su presencia en Caacupé, peregrinación que viene realizando con amigos desde hace unos cuatro años.
Una gran mayoría de los jóvenes participa de la celebración por razones de estudios, salud y trabajo.
