Inédita misa a puertas cerradas en Caacupé

Este artículo tiene 5 años de antigüedad
Ayer no hubo misa en la Basílica pero sí en la capilla del obispado. Se encomendó a la Virgen María a todas las personas y población afectadas por coronavirus y su pronta recuperación.
Ayer no hubo misa en la Basílica pero sí en la capilla del obispado. Se encomendó a la Virgen María a todas las personas y población afectadas por coronavirus y su pronta recuperación.Archivo, ABC Color

En un hecho sin precedentes, la misa dominical principal presidida por monseñor Ricardo Valenzuela, no se realizó en la Basílica, sino en una capilla del obispado, para evitar las aglomeraciones.

CAACUPÉ, Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional). Monseñor Ricardo Valenzuela, obispo de Caacupé, solicitó ayer a las autoridades políticas y económicas del país, que apoyen con fuerza la economía y la investigación ahora que el virus está creando lamentablemente una nueva crisis no solamente económica, sino en muchos otros aspectos. Fue durante la homilía que en un hecho sin precedentes no se realizó en la Basílica de Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé, como ocurre tradicionalmente, sino en una capilla privada del Obispado, con la presencia de sacerdotes y representantes del equipo de liturgia.

El obispo exhortó a todos los paraguayos a poner de su parte todo lo mejor, en cuanto a empeño, disciplina, voluntad y fe inquebrantable para cumplir esta cuarentena. “Quedémonos en casa, ya que solo así juntos venceremos este flagelo del coronavirus”, dijo.

Agregó que esta experiencia del coronavirus tendrá un sentido renovador en nuestras vidas. “Este tiempo de Cuaresma nos puede ayudar a vivir el coronavirus con un sentido cristiano. Por qué no conectar el coronavirus con la Cuaresma entendida como conversión y acercamiento a Dios: La cuaresma nos pone un tiempo para vivir en espíritu de penitencia y ahí está el coronavirus que nos está poniendo en bandeja esta situación”, especificó.

Monseñor Valenzuela apuntó “que estos días asistimos estupefactos a todo lo que dicen las noticias que producen en nosotros el miedo, el pánico. Es momento de reaccionar, ser proactivos, dibujar el mapa entero de nuestra existencia. Vivir con un sentido cristiano. El no salir de casa para evitar el contagio masivo, es un modo de vivir la solidaridad y de salir del egoísmo. Hay que pensar en los demás y en su bien”.

Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy

El Obispo apuntó que habrá que reorganizar el plan de vida personal y ajustarlo a lo que más convenga a la familia, y que habrá que obedecer a las autoridades sanitarias y políticas por el bien de todos y la patria.