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En abril de 2015, bajo la intendencia de Arnaldo Samaniego (Partido Colorado), comenzaron a operar en 78 cruces de Asunción 400 equipos semafóricos donados por el Gobierno coreano a la Municipalidad por valor de US$ 5 millones. Uno de los equipos instalado en Aviadores del Chaco y Madame Lynch está en el depósito por la construcción del paso a desnivel.
Los conductores reclamaron porque no están operando de forma óptima en algunos cruces. Luis Amarilla, responsable del Centro de Gestión de Tráfico, dijo que los principales problemas son las interrupciones del servicio eléctrico y la falta de mantenimiento de la fibra óptica. Todos los años presupuestan G. 700 millones y G. 1.000 millones, pero ejecutan poco más de G. 100 millones.
El cable óptico se instaló en los postes de la ANDE y de la Copaco, y ante cualquier evento se corta, con lo cual dejan de recibir la información de la operatividad de los aparatos instalados en ese sector. Si tienen el servicio, la respuesta al inconveniente es de 15 a 20 minutos, dependiendo del tráfico en ese momento, explicó Amarilla.
De los 209 cruces semafóricos, 77 corresponden a la donación coreana; 132 son todavía semáforos convencionales. De estos antiguos aparatos 14 están incluidos en el sistema de control remoto. Los restantes 115 que están fuera del sistema se reparan solamente mediante denuncias ciudadanas en caso de desperfecto.
De acuerdo a los datos que obran en la página web de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas la Comuna invirtió cerca de G. 10.000 millones en la construcción del edificio en la Costanera, desde donde se monitorea cada uno de los cruces semafóricos. En un panel gigante instalado en la pared los operadores pueden ver el funcionamiento de los aparatos. En verde aparecen los cruces en funcionamiento y en gris los que no funcionan.
El viernes pasado 16 estaban grises, pero no era porque no estaban funcionando sino porque la fibra óptica no enviaba información, explicó Amarilla.
La instalación del cable de fibra óptica costó alrededor de G. 8.000 millones. Fue adjudicada en 2014 a la empresa Comtel SA, representada por Elisa Rolón y Liliana Velázquez, por la suma de G. 6.290 millones, pero mediante una adenda se amplió por otros G. 1.258 millones.
La construcción del edificio, que ya está deteriorado, se adjudicó en dos etapas. Un primer contrato otorgó la Municipalidad a la empresa Rodríguez Hnos., representada por Claudio Rodríguez, por G. 609.999.000. Se aprobó una adenda que amplió el monto por G. 103.579.000. La obra de la segunda etapa la Comuna adjudicó a la firma Caldetec Ingeniería SRL, representada por Jorge Ozuna Lima, por G. 695.18.000. Así como los demás contratos este monto otorgado tuvo un reajuste de G. 139.000.000.