Cartes entregó gratis a Brasil energía paraguaya de Itaipú

El Brasil está viviendo, desde fines de 2013, un momento crítico en su sistema eléctrico. Los reservorios de las numerosas centrales hidroeléctricas que posee –y que abastecen la mayor parte del sistema eléctrico brasileño– están en su nivel mínimo desde hace más de un año, hasta ahora. El precio de mercado de la electricidad en el Brasil, el “precio de liquidación de diferencias” (PLD), se ha mantenido por encima de 300 US$/MWh, pues para satisfacer la demanda, debe quemar hidrocarburos (gas natural, y/o derivados de petróleo) que cuestan unos 300 US$/MWh.

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Bajo tales circunstancias –que pueden llegar incluso a un catastrófico racionamiento, como padeció el Brasil en el 2001 y 2002–, la conducción brasileña del sector eléctrico busca energía barata de donde sea. En el 2001/2 el Brasil consiguió que el Gobierno paraguayo le entregue –sin cobrar nada– la energía paraguaya del embalse de Itaipú, ahorrándose cientos de millones de dólares.

Durante el gobierno de Fernando Lugo reivindicamos la soberanía hidroeléctrica y el mismo Brasil aceptó que el Paraguay podrá venderle su energía al mercado brasileño, a precios de mercado (acuerdo Lula-Lugo del 25 de julio del 2009).

Ante las propuestas brasileñas de utilizar el agua del embalse en diversos años antes del golpe del 2012, la respuesta del gobierno de Fernando Lugo fue que, si el Brasil querría utilizarla, debería pagar el precio de mercado y no llevarla gratis.

En febrero de 2014, el nivel del embalse de Itaipú descendió a 215,5 metros sobre el nivel del mar (msnm), cuando que no se puede bajar de la cota 219 msnm (mínimo operacional) sin afectar la soberanía nacional, pues el agua embalsada es 50% paraguaya. Dos veces más en el curso del 2014 (setiembre y noviembre, lo que ahora se ha profundizado) se ha utilizado agua y energía del embalse de Itaipú. El primer uso del agua del embalse significó la generación de 1.750 GWh adicionales. El 50% (875 GWh es agua soberanamente paraguaya) y el gobierno de Cartes ha permitido su uso –y abuso– sin que se nos pague nada. A precios de mercado en el Brasil, de 300 US$/MWh, el Paraguay dejó de percibir (300 x 0,875 =) US$ 263 millones, tan solo en la primera baja del nivel del embalse. Las dos bajas posteriores del 2014 fueron algo menores (casi a 216 msnm). Lo no percibido por el Paraguay superaría los US$ 600 millones hasta el presente. Mientras tanto, la Argentina le vendió al Brasil energía paraguaya de Yacyretá a precios exorbitantes.

Hay que acotar que, si el Paraguay permite que se usen las aguas binacionales del embalse de Itaipú a cambio de recibir el precio de mercado, al mismo tiempo se destraba su uso y el Brasil se beneficiaría también con su parte, lo que le da un beneficio igual (US$ 600 millones), equitativo al que tendría el Paraguay. Lo que ahora se ha hecho, es que el Brasil “use y abuse” del agua paraguaya del embalse de Itaipú. No nos paga nada y ellos tienen un beneficio que es por lo menos del doble de lo que deberíamos haber percibido, de (600 x 2 =) US$ 1.200 millones, en desmedro de nuestra soberanía (¡el 50% del agua del embalse de Itaipú es paraguaya!).

Esta recaudación (US$ 600 millones) nada mal nos habrían venido para que nuestros hospitales vuelvan a tener siquiera aspirinas, jeringas y gasa, o para construir 60.000 viviendas populares de US$ 10.000 cada una, que generaría mucho empleo, sin necesidad de endeudarse.

Está establecido, en el acuerdo del 25 de julio del 2009, que la ANDE podrá vender la energía paraguaya de Itaipú al mercado brasileño.

¿Por qué no exigió el gobierno de Cartes que se nos pague, por nuestra agua/energía del embalse de Itaipú, lo que cualquier empresa privada afincada en el Brasil cobra (el PLD, igual a por lo menos 300 US$/MWh), o aún mas que le pagó a la Argentina (por nuestra energía de Yacyretá, para peor)? ¿Por qué no se hizo respetar la soberanía hidroeléctrica nacional? Al parecer, el “uso y abuso” de nuestra soberanía no es tan solo una frase mal dicha por Cartes, sino una práctica comprobada y concreta de su gobierno.

(*) Parlamentario del Mercosur y excoordinador de la Comisión de Entes Binacionales Hidroeléctricos (2008-2012).

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